¿Cómo sobrevivir a la crisis financiera?

5. Garantizar la correcta valoración de los activos

Los planes de negocio pueden cambiar en una economía incierta. Por lo tanto, el valor razonable o estimado de vida de los activos intangibles puede cambiar también. Opciones sobre acciones y otras estrategias de compensación también pueden requerir ajustes con el fin de conservar empleados clave. Si una empresa está buscando hacer una adquisición estratégica con el mercado a la baja, se deberían capitalizar las valoraciones más bajas del objetivo en cuestión. Tenga en cuenta, además, los activos potencialmente deteriorados a causa de la disminución de las valoraciones relacionadas con el mercado global, así como las oportunidades de adquisición creadas por estas mismas fuerzas del mercado.

6. Evaluar todas las áreas funcionales por eficiencia

A veces es necesario dar un paso atrás en las tareas y funciones del día a día para evaluar qué ajustes son necesarios para corresponder a la evolución del entorno empresarial. Este es un excelente momento para reevaluar la cantidad de trabajo administrativo y de producción necesario para mantener adecuadamente un nivel saludable de operaciones. La “adecuación” estratégica puede ser una herramienta muy valiosa en este tipo de entorno económico.

7. Supervisar los contratos de externalización

En una recesión económica, las empresas de tecnología suelen acudir a la subcontratación con la esperanza de obtener ahorro de costes. Sin embargo, con el fin de tener éxito, la actividad debe estar bien controlada. Deben tener objetivos claramente definidos -previa la debida diligencia-, matrices de medición definidas, y planes de contingencia. Además, la actual recesión en la economía requiere una evaluación periódica de la salud financiera de los proveedores y vendedores clave de la empresa.

8. Evaluar la tecnología actual y la línea de productos

Ahora, más que nunca, las empresas de tecnología deben controlar sus niveles de inventario para asegurarse de que una nueva y mejor tecnología no haya sido sacada al mercado antes de que su actual inventario se quede obsoleto. Deben instituirse controles que realicen cálculos constantes de los movimientos de inventario para que la dirección pueda responder adecuadamente a los cambios en las condiciones y en la tecnología del mercado.