Appian: “La IA ha dejado de ser un juguete para ofrecer calidad de grado empresarial”

Entrevistamos a Ramón Riquelme, Senior Advisory Solutions Consultant de Appian, que nos habla de las últimas novedades en su plataforma que el fabricante está trayendo al mercado español.
Desde que Appian aterrizara oficialmente en el mercado español, este fabricante de software ha experimentado un crecimiento continuado tanto a nivel de negocio como de capacidades y funcionalidades.
Su llegada al mercado no ha cambiado notablemente desde entonces, aunque no su filosofía y sus raíces basadas en la gestión de los procesos de negocio. Tampoco ha cambiado la visión que hace unos años nos ofrecía Matt Calkins, CEO de Appian, en esta entrevista.
De hecho, ya por aquel entonces nos hablaba de la inteligencia artificial generativa sin que aún se hubiera acuñado en el mercado ese término, algo que nos facilitó mucho el titular de aquella entrevista: “En un futuro cercano, no habrá casi diferencia entre hablar con una computadora y hablar con un amigo”. Dio en el clavo.
Un poco más tarde y durante su intervención en el congreso Appian World 2023, adelantaba el concepto de IA privada para que pudiera ser adoptada a nivel empresarial. Calkins ha sido, por tanto, un visionario de lo que finalmente está ocurriendo en el mercado tecnológico, algo que ha impulsado a Appian a ser un referente a nivel global a la hora de facilitar que la tecnología se ponga al servicio de las empresas para que sean más eficientes y rentables.
En esta ocasión hemos podido charlar con Ramón Riquelme, Senior Advisory Solutions Consultant de Appian, para que nos contara cómo están aterrizando en España las últimas novedades presentadas por la compañía durante el congreso Appian World 2025, celebrado a finales de abril en la ciudad norteamericana de Denver y al que Silicon tuvo la ocasión de asistir.
Y es que Appian ha puesto la inteligencia artificial en el centro de los procesos, que son el germen y el sentido de la existencia de una plataforma que va más allá de los orígenes del BPM para controlar todo lo relacionado con RPA, la minería de procesos y la gestión unificada de los datos… siempre con la IA tocando de forma transversal cada componente de dicha plataforma.
A continuación, nuestra entrevista con Riquelme:
—Para comenzar, me gustaría que nos comentaras cómo ha ido vuestro evento Appian Around the World Madrid. ¿Qué es lo que habéis estado mostrando y qué intereses ha habido por parte de los profesionales que asistieron?
Este año, el tema principal ha sido Inteligencia Artificial, sin ninguna duda. Pero de una forma realmente diferencial con respecto a lo que hemos visto en años anteriores. Los agentes que hemos presentado están cambiando las reglas del juego.
La IA ha dejado de ser “un juguete” donde el usuario de vez en cuando le hacía una pregunta, siendo la respuesta útil en determinadas ocasiones.

Ahora, estamos permitiendo que la IA nos dé información sobre cómo se están tomando las decisiones o qué es lo que hemos hecho desde un punto de vista empresarial. Podemos conocer cada una de las ejecuciones de un agente de IA y cómo se han decidido las cosas: por qué se ha hecho algo concreto, cuáles fueron los datos de entrada, los de salida, cuál fue la secuencia de pasos que dio o incluso de dónde sacó la información, la fuente concreta que justifica que nosotros hayamos podido tomar esa decisión.
Todo esto se traduce en calidad de grado empresarial, por lo que ha despertado el interés de muchas compañías para ver realmente hasta dónde podemos llegar con la IA.
Por otra parte, la situación que vemos en la actualidad es que hay muchísima oferta distinta para poder abordar cosas paralelas o que realmente no sabemos muy bien cómo diferenciar para usar una herramienta u otra. Esta problemática nos coloca en una posición privilegiada.
—Te refieres a una plataforma capaz de unificar e integrar todos los procesos y la información empresarial para que la IA haga todo ese trabajo…
Eso es. Nuestra plataforma no solamente tiene la inteligencia artificial, sino el potencial de integrarnos con otras cosas, el potencial de proporcionar herramientas a los agentes. ¿Y qué herramientas le proporcionamos a un agente? La capacidad de hacer muchas tareas, que son precisamente las que veníamos haciendo habitualmente.
Desde la integración hasta arrancar un proceso que en un momento determinado ejecute una acción o incluso que coordine algo mucho más complejo entre un montón de departamentos distintos. Ahí es donde nosotros realmente tenemos mucho que aportar.
Por otra parte, mantenernos en el ámbito de la misma plataforma permite acortar mucho los tiempos de despliegue, de desarrollo, de definición, etc. En definitiva, de abstraernos de la complejidad de integrar componentes.
—Con el paso de los años, la plataforma de Appian ha ido creciendo a nivel de funcionalidades, desde BPM a RPA, Minería de procesos, Data Fabric, IA… A día de hoy, ¿qué parte de vuestra plataforma, que además es modular, está siendo más popular a nivel de adopción?
A nivel de adopción, existe el mismo interés en todas esas áreas que comentas. Es así porque a la inteligencia artificial hay que proporcionarle herramientas, pero también información sobre la cual poder tomar decisiones y, por último, la estructura y la coordinación para que todo en su conjunto se pueda exponer a las personas.
Destacaría la parte de datos, porque la información que manejan las organizaciones proviene en la mayoría de ocasiones de sistemas dispersos. Es fundamental que se puedan proporcionar todos los datos que aporten valor. Y aquí lo primero que es necesario es una gran capacidad de integración.
Appian permite, con el plano de Data Fabric, interrelacionar toda esa información, y que se pueda ver como un todo, no como islas dispersas en distintos puntos.
Sin esa integración, es necesario indicar a los agentes de IA dónde están los datos que debe usar. Por el contrario, con Data Fabric sólamente hay que decirle al agente “esta es tu red de información ya relacionada para que ejecutes tu proceso”.
—Pero no todo el mundo puede tener acceso a la misma información, por lo que la seguridad y la granularidad son muy importantes aquí. ¿Cómo lo afronta Appian?
Efectivamente, ese es otro punto de gran interés. No parece un buen plan dejar toda la información disponible para que los usuarios hagan lo que quieran con ella.
Entonces, sobre esa red de información ya relacionada entre sí, Appian segrega de una forma muy clara cuáles son los límites de seguridad de cada cosa. De esta forma, cuando el usuario haga una pregunta al sistema de inteligencia artificial, lo podrá hacer con el contexto específico al que ese usuario tiene acceso.
Data Fabric es capaz de segregar muy bien porque pone los límites de seguridad necesarios en el momento de la definición de los datos. De esta forma, cuando nos coloquemos delante de la pantalla, Pablo verá una cosa y Ramón verá otra distinta en función del trabajo y acceso otorgado a cada uno.
En otras palabras, la seguridad es inherente a los datos. No está definida en la pantalla, tampoco en el agente o en el gráfico, sino que se define durante la integración de toda la información.
—Moviéndonos a los procesos, Appian ha destacado desde sus orígenes en el campo del BPM. Pero la tecnología para diseñar y definir los procesos empresariales ha variado y evolucionado mucho durante este tiempo. ¿Siguen siendo válidos los procesos diseñados hace 10 años o ha sido necesario ir reescribiéndolos para adaptarlos a las nuevas tecnologías?
Appian siempre ha trabajado en la línea de intentar hacer sus aplicaciones lo más “retrocompatibles” que se pudiera. Es cierto que con el paso del tiempo ha ido variando la forma en la que se ve todo en pantalla, como es el caso de las distintas versiones de HTML. Sin embargo, la definición sigue siendo la misma y puede seguir evolucionando para sacar partido de nuevas tecnologías que van saliendo sin tener que tocar prácticamente nada.
Pero aquí también entra en juego el papel actual de los agentes y de la minería de procesos, porque ahora son capaces de rastrear las definiciones originales y detectar posibles ineficiencias o mejoras de forma automatizada. Y nuestra plataforma permite sustituir piezas de forma muy sencilla por otras mejoradas o que son capaces de hacer más cosas con la tecnología actual. Más aún, si encontramos una mejora del rendimiento con esas nuevas piezas, podemos replicarlas en otros sitios o experimentar con ellas de forma dinámica.
—Para finalizar, me gustaría preguntarte por los agentes de IA que se comunican entre sí sin intervención humana. ¿Cómo afronta Appian esta nueva generación de inteligencia artificial?
Para mí, y esto es algo que también has oído de nuestro gurú y CEO, Matt Calkins, la capa de procesos es la clave para hacer que esa coordinación suceda de una forma controlada. Los agentes van a tener una serie de herramientas, datos y objetivos definidos, pero siempre van a tener una entrada y una salida.
En ambos extremos hay que poner una capa de control de procesos para que los agentes se puedan comunicar entre sí de forma controlada. Se les puede dar cierta libertad para que se comuniquen, pero siempre con unas barreras y unas reglas bien definidas en la capa de procesos, lo que permitirá responder a los objetivos de negocio, a unas normativas y a las necesidades o peticiones de cada organización.