ARM desea seguir evolucionando y para ello busca crecer en nuevos negocios, siendo uno de ellos el de las supercomputadoras.
Según recogen en ITProPortal, la compañía ha desarrollado un chip que podrá verse en el nuevo superordenador que lanzará la firma japonesa Fujitsu.
En concreto, estará integrado en la supercomputadora bautizada como Post-K, que promete ser entre 50-100 veces más rápida que su predecesora, la conocida como modelo K.
El nuevo procesador de ARM estará basado en su arquitectura v8A de 64-bit, y parece que contará con una mayor eficiencia energética que sus rivales.
Además, contará con las nuevas extensiones vectoras de procesamiento llamadas Extensiones Vectoras Escalables.
De cara al futuro se espera que ARM emplee el dinero que recibirá por la venta a Softbank, que asciende a los 32.000 millones de dólares, para fortalecer su posición en la industrias de servidores y el Internet de las Cosas (IoT).
En el campo de las supercomputadoras, todo apunta a que el nuevo hito en la industria será alcanzar una velocidad de 1 exaflop, algo para lo que trabajan gigantes del mercado como Intel, Nvidia e IBM.
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