Becarios, sí… pero bien pagados

En nuestro país, becario es sinónimo de infraempleo. En cambio, las empresas de Silicon Valley llegan a pagar a sus becarios más de 6.000 dólares al mes.

El mes pasado, José Ignacio Wert, ministro de Educación, anunciaba que su departamento planeaba echar mano de los estudiantes con mejor expediente para contratar a 2.000 becarios encargados de realizar tareas de apoyo a la enseñanza en centros con especiales dificultades. La opinión del sector educativo ha sido unánime. En un momento en el que se ha recortado sustancialmente el número de profesores, se considera que esta iniciatiava intenta sustituir docentes por trabajadores a bajo coste.

Y es lógico pensar esto porque, desgraciadamente, ‘becario’ suele ser sinónimo de trabajo precario en nuestro país. No obstante, conviene señalar que el salario percibido por el trabajador en prácticas varía en gran medida en función de la actividad a la que nos refiramos. “Depende mucho de las carreras profesionales. Podemos decir que el salario medio de los becarios en España se encuentre entre los 600 y 1.000 euros. Si hablamos de perfiles como ingeniería aeronáutica, en la que hay una gran demanda de profesionales, podemos decir que se encuentra en torno a los 1.400 euros mensuales. Todo ello depende de la demanda de profesionales de cada sector. En aquellos en los que haya un gran volumen de personas licenciadas en esa carrera, los salarios son más bajos; mientras que en los que hay menos profesionales disponibles, son más altos”, especifica Ramón Egea, director de Recursos Humanos de jobandtalent.

A partir de los datos recabados por las ofertas publicadas en Infojobs, este portal de empleo especifica que “el 82% de las empresas ofrecen un salario entre 6.000 y 12.000 euros; y un 10%, entre 12.000 y 18.000 euros. En el sector TIC, el 64% ofrece salarios que van de 6.000 a 12.000; y un 16%, de 12.000 a 18.000 euros”. El sector tecnológico es el que más ofertas de este tipo presenta, con un 21,7% del total, seguido por el segmento de administración de empresas (13,7%).

Además,  Infojobs destaca que “la jornada ofrecida en este tipo de contratos es completa en un 48% de los casos”. En el sector TIC, los contratos a tiempo completo suponen el 42%. Y las contrataciones mediante este tipo de contratos se reparten a partes iguales entre pymes y empresas de más de 200 empleados, mientras que sólo un 4% de las ofertas son presentadas por headhunters.

Silicon Valley, ‘sueño dorado’ del becario

Aunque la situación en nuestro país sea bastante mala, ser becario no tendría por qué ser sinónimo de trabajo precario. Al contrario, esta figura debería entenderse como un modo de captar talento y fichar a los jóvenes con mayor proyección. Así es como lo entienden las grandes empresas tecnológicas, que pagan a sus ‘internships’ sueldos equiparables a los de un directivo en España.

Compañías como Twitter, Facebook, LinkedIn, Microsoft o eBay pagan a sus becarios más de 6.000 dólares mensuales, según indicaba un informe de Glassdoor. Y una línea similar siguen los datos aportados por InterMarch. “También debemos recalcar que el coste de vida en Silicon Valley es altísimo. Una persona con un salario de 600 dólares no podría vivir allí. Los sueldos son acordes tanto a las condiciones de vida como a los beneficios millonarios de estas empresas. También los perfiles de becarios que entran en estas empresas no son tan junior como los que podemos encontrar en una empresa en España”, advierte Egea.

¿Pero por qué cobran tanto? “Los becarios de empresas tecnológicas en Silicon Valley tienen un perfil muy definido. La mayoría de ellos tienen un perfil de programador y antes de haber aterrizado en estas empresas han creado sus propios sitios web o han tenido alguna experiencia previa con los lenguajes de programación. Para perfiles no técnicos, para poder ser becario de Google o Facebook hay que pasar un largo proceso de selección en el que se hacen diferentes pruebas psicotécnicas, de conocimiento en su área y de resolución de conflictos que puedan llegar a encontrarse dentro de estas empresas”, anota.

Estas grandes corporaciones evalúan exhaustivamente a los candidatos, tratando de escoger la ‘flor y nata’ del mercado. “Cualquiera que busque ser becario en cualquiera de estas empresas debe tener en cuenta que tiene que estar muy bien preparado y , sobre todo, tener una mente abierta y una actitud muy positiva. Este tipo de compañías, además de los conocimientos técnicos, valoran que tengan una actitud acorde a la cultura empresarial de la compañía. Por ejemplo, en Google lo han catalogado como tener ‘Googleyness’, uno de los valores que puede hacer que estés dentro del proceso de selección o fuera”, anota. No en vano, la compañía de Mountain View recibe cada año alrededor de tres millones de solicitudes de trabajo y sólo contrata a 7.000 empleados, por lo que apenas hay un 0,23% de posibilidades de ser contratado. Los extraños acertijos que proponía Google eran una muestra de su modo de evaluar el razonamiento abstracto y la capacidad de resolución de problemas complejos por parte de los candidatos, más allá de sus aptitudes o su currículum.

¿Un modelo importable?

Como vemos, la situación es muy diferente de la que encontramos en nuestros país. No obstante, también hay algunas compañías en España que están adoptando este modelo, tratando de hacerse con los servicios de los jóvenes más cualificados y con mejores perspectivas. “En España tenemos empresas como las ‘Big Four’ -Deloitte, KPMG, PwC y EY-, que tienen muy buenos programas de becas para perfiles todavía sin el graduado universitario y para recién licenciados. Los procesos de selección de estas empresas buscan a los mejores talentos del sector y las condiciones que ofrecen son muy buenas. Aprenden mucho y son un trampolín en su carrera profesional. Por otro lado, las empresas tecnológicas que tienen su sucursal en España –Google, Facebook…- también tienen muy buenas condiciones para los becarios”, comenta el director de RR.HH. de jobandtalent. Así, junto a las prácticas en las citadas empresas, también se puede acceder a prácticas la filial española de Google o Facebook. “Tener este tipo de firmas dentro del currículum es un valor añadido y una señal del talento del candidato”, apunta.

En cualquier caso, parece que la situación de los becarios está mejorando en algunos sectores. “En general, los programas de becas de las empresas actualmente ofrecen mejores condiciones que antes. También hemos de decir que hemos atravesado una situación económica en crisis en la que la contratación de talento era complicada, pero posible”, afirma Egea.

Además, insiste en la utilidad de estos programas para impulsar la carrera profesional. “Recomendamos a los jóvenes que aprovechen sus becas al máximo y aprendan a hacer tanto su trabajo como el que hacen sus jefes porque es la mejor manera de aprender. Los jóvenes españoles tienen una excelente formación teórica pero poca experiencia práctica cuando salen de la universidad. Por ello, se hace totalmente imprescindible que hagan prácticas durante la carrera, porque es dónde van a adquirir esa experiencia que demandan las empresas. Cuanto mayor sea la experiencia laboral, mejores serán las becas y puestos de trabajo a los que podrán acceder”, asegura.

Cazatalentos al acecho

Aunque antes veíamos que los headhunters apenas tienen relevancia a la hora captar becarios en nuestro país, el papel de estos especialistas va adquiriendo más peso. “En las empresas tecnológicas, los headhunters se dedican a encontrar talento en la red y en las universidades. La gran ventaja que tienen los headhunters de empresas como Google es que tienen un acceso ilimitado a datos y lenguajes de programación inéditos que pueden encontrar a través de sus buscadores. Gran parte de los becarios de estas compañías son captados a través de headhunters que han encontrado su trabajo en la red y han visto que pueden aportar un valor añadido a su empresa gracias a lo que han desarrollado. Por otro lado, muchos de estos headhunters acuden a los tribunales de proyectos de final de carrera para poder captar nuevos talentos en el mundo de las finanzas o en otras áreas que no sean las técnicas. Buscan el trabajo de estudiantes sobresalientes que puedan ser aptos para trabajar en Microsoft, Google o Facebook”, puntualiza Egea.