Birmania: en abierto, gracias a la tecnología

Los disidentes están actuando como periodistas clandestinos que emiten cuando y como pueden a los corresponsales situados en Tailandia e India. El papel de las nuevas tecnologías está siendo clave para mostrar al mundo lo que pasa en este país cerrado al exterior desde hace dos décadas. Y la Junta dictatorial no puede hacer nada por evitarlo.

La conexión se realiza a través de Internet y por llamadas a móviles en el exterior. Horas después de que empezara la revolución, los disidentes burlaron la vigilancia policial para escribir en blogs y hacer fotos y vídeos con los móviles.

Sin embargo, esta mañana, The Guardian ya informa de que la Junta birmana está consiguiendo cerrar los cibercafés y desconectar las redes de los móviles.

“Estaba recibiendo correos electrónicos hace tres días pero ahora parece que he perdido el contacto”, comenta Vincent Brussels, director de la sección asiática de Reporteros sin Fronteras. “Aquellos que pueden todavía acceder a Internet dicen que la conexión es muy lenta y que es difícil enviar imágenes”.

Aunque menos del uno por ciento de la población tiene acceso a Internet, y sólo 25.000 personas tienen una cuenta de correo electrónico, los testigos de la represión que se está viviendo estos días en el país han conseguido encontrar la forma de emitir de forma digital. Los bloggers evadieron los cortafuegos oficiales y la gente con vídeos pudo acceder a embajadas, empresas extranjeras y organizaciones no gubernamentales para emitirlos, ya que estos centros no tienen un control tan férreo de la red.

Un blogger birmano asentado en Londres explicó a la BBC: “Tengo a unas diez personas dentro, en distintos sitios. Toda mi gente se encuentra entre los budistas, caminan con los manifestantes y en cuanto tienen las imágenes me las envían desde algún cibercafé”.

vINQulos

El País