La colaboración, catalizadora de la productividad

Movilidad, cloud computing, oficinas abiertas… La sociedad y la economía se están reorientando hacia un modelo en el que la colaboración ha pasado a un primer plano.

El relevo generacional y el desarrollo tecnológico están facilitando el desarrollo de una nueva manera de entender las relaciones y el modelo productivo. ¿Por qué trabajar de forma individual y competitiva si la colaboración es más productiva?.

Hasta hace poco, las herramientas de colaboración eran entendidas por las empresas como algo que convenía tener disponible. Se entendían como una ayuda pero no se consideraban como algo esencial en el trabajo cotidiano. Pero el escenario ha cambiado. ¿Cuántas compañías recurren a diario a herramientas como TeamViewer, Dropbox, WeTransfer o los múltiples recursos de Google, como Drive, Docs, etc.?

La colaboración ha pasado a un primer plano, impulsada por varios factores. Polycom, empresa especializada en comunicaciones unificadas, opina que veremos surgir este nuevo espacio de trabajo del futuro, disponible en cualquier lugar y donde la colaboración forma parte de la estructura de negocio. Así, identifica algunas tendencias.

En primer lugar, opina que los ‘millennials’ ya están configurando ese nuevo espacio de trabajo. Asegura que los integrantes de esta generación son colaborativos por naturaleza y aprovechan el vídeo para comunicarse y para aprender. Hay que destacar que el 78% de los ‘millennials’ reconocen que tener acceso a la tecnología que más les gusta les hace ser más productivos en el trabajo, según un estudio de Polycom.

La movilidad ha llegado a todos los ámbitos de la sociedad, por lo que el entorno laboral no es una excepción. El espacio de trabajo del futuro no está limitado físicamente, sino que se pueden desempeñar las tareas desde cualquier lugar, en cualquier momento y desde cualquier dispositivo. Y todo ello sin mermar la productividad. Un estudio encargado por la compañía desvela que el 72% de los negocios en el Reino Unido ya están ofreciendo o ampliando las opciones del teletrabajo. En España, un 35% de los empleados accedería a una reducción de sueldo por tener más flexibilidad en su puesto de trabajo. Además, cabe esperar que en 2016 aumente el número de trabajadores que utilizan sus propios dispositivos móviles para conectar, controlar e interactuar con la solución de colaboración de la empresa, sin importar dónde estén.

Este cambio de modelo se apoya en el desarrollo tecnológico. Por ejemplo, Polycom indica que usar el navegador web para acceder a la colaboración es uno de los principales retos. En este sentido, la tecnología Web Real-Time Communication (WebRTC) está emergiendo como una opción técnica muy interesante. Igualmente, el cloud compunting ha sacudido el modelo tradicional. En el pasado, integrar soluciones de colaboración era muy difícil y costoso para las pequeñas empresa, dadas las limitaciones de sus equipos y de su presupuesto. La nube ha derribado esta barrera, permitiendo que las compañías de menor tamaño accedan a este tipo de herramientas sin necesidad de hacer grandes inversiones y, además, con flexibilidad para adaptarse a sus necesidades reales en cada momento, gracias a su escalabilidad.

Asimismo, como contábamos hace poco, los espacios de trabajo están evolucionando hacia el modelo de open office, orientados hacia el trabajo flexible y colaborativo. Esto repercute en la planificación de las instalaciones y las tecnologías de la información de la compañía. La colaboración visual ya no se circunscribe a la sala de conferencias y a la recepción, sino que llega a toda la empresa y a espacios virtuales fuera de la oficina.

Finalmente, Polycom considera que lo que va a impulsar la productividad en 2016 son las soluciones que permiten a los usuarios compartir presentaciones, documentos y otros productos de trabajo en tiempo real y de forma automática, sencilla e intuitiva.