¿Cómo es el currículo perfecto de un directivo?

El formato ideal es un DIN-A4 en PDF, con fondo blanco, tipografía común y, en función del tipo de trabajo, se incluirá fotografía o no.

Según la firma de consultoría y headhunting Padula & Partners, para enfrentarse a un proceso de selección, es importante que el curriculum vitae (CV) sea claro y conciso. Si el candidato tiene muchos años de experiencia, puede ocupar más de una página, pero tampoco es conveniente  sobrepasarse. El formato ideal es un DIN-A4 en PDF, con fondo blanco, tipografía común y, en función del tipo de trabajo, se incluirá fotografía o no.

Uno de los errores más frecuentes que observan los expertos de Padula & Partners al leer currículos es la falta de tiempo que algunos candidatos emplean en revisarlo y adaptarlo a cada puesto. En el caso de los directivos puede ser debido a que muchos no están en búsqueda activa de empleo cuando son tanteados. Y no es conveniente comenzar un proceso de selección en el que no se esté interesado, pues puede jugar en contra del candidato.

Los reclutadores demuestran mucho interés en las referencias de los CV, pero no en sus hobbies de los candidatos. Es una parte que sí resulta más interesante para la entrevista personal. En el caso de profesiones donde la creatividad es esencial, es preferible disponer aparte de todos los trabajos creativos que tener un CV demasiado creativo.

Fernando Galante, socio director de Padula & Partners, afirma: “Siempre estamos en búsqueda activa de candidatos a través de nuestras redes de contactos, organizaciones, centros formativos, etc.  Redes profesionales como Xing o LinkedIn nos ayudan mucho al proceso de selección de candidatos, mientras que otras más personales como Twitter, Facebook o Instagram no son nada determinantes para el proceso y no accedemos a estos perfiles para el proceso de selección”.

En función del área y del sector del puesto de trabajo, se valoran más unos aspectos u otros del CV. Por ejemplo, para puestos en el sector jurídico, se valora más la parte de la formación y el expediente académico; para un perfil IT, también se valoran sus cursos y certificaciones; mientras que para puestos más comerciales es más determinante la experiencia.

Lo que es común para todos es el manejo de idiomas. Además, crece la demanda de directivos con capacidad de gestión emocional propia y de equipos, así como la aptitud para superar y detectar obstáculos, la llamada resiliencia.

Una vez superado el filtro del currículo, el siguiente paso es el de la entrevista. A la hora de que un candidato se enfrente a ella, debe tener en cuenta que la apariencia es fundamental. Eso sí, no siempre es necesario ir de traje, dado que hay sectores donde tienen su propio código estético.

Por último, según Padula & Partners, es importante conocer la empresa donde ser quiere trabajar y prepararse previamente la entrevista, incluso si se realiza vía Skype, herramienta cada vez más utilizada debido a la creciente movilidad, y muy buena a la hora de filtrar candidatos.