El malware amenaza nuestros dispositivos móviles

La popularización de smartphones y tablets y su desprotección los convierte en un objetivo propicio para los ataques de malware por parte de ciberdelicuentes.

Hace apenas unos días, Google decidía indemnizar a los usuarios que descargaron ‘Virus Shield’. Más de 10.000 compradores pagaron 3,99 dólares para adquirir esta aplicación en Google Play Store. Sin embargo, este supuesto antivirus realmente carecía de cualquier utilidad.

Esta noticia podría quedarse en una mera anécdota, pero refleja la inquietud de los usuarios acerca de la seguridad de sus dispositivos móviles. Y quizá este temor no sea infundado. Según los datos de un reciente estudio de Kapersky Lab, en 2013 se detectaron 143.211 programas maliciosos para smartphones y tablets. La popularización de estos aparatos, junto a la enorme información que transportamos en ellos, la gran desprotección ante posibles intrusiones y la falta de conciencia acerca de los riesgos componen un cóctel perfecto para el desarrollo de malware.

¿Pero qué buscan los ciberdelicuentes en nuestros dispositivos móviles? Hay diferentes tipos de malware, en función del fin pretendido. Según las cifras del citado  estudio, el 33,5% de los ataques tiene como objetivo el robo de dinero de los usuarios, que se materializa en el envío de SMS y llamadas a números premium, intercepción de contraseñas de servicios bancarios y de pago para móviles, robo a través de los servicios de pago móviles o sustracción de bitcoins.

El malware también se destina a sustraer datos (20,6%) -robo de cuentas online, lectura remota de SMS y correos electrónicos y robo de fotos y documentos- o para ganar dinero (19,4%) – creación de ‘botnets’, estafas con falsos anuncios o secuestro de archivos para pedir un rescate por ellos -. Además, este software intrusivo también puede espiarnos, controlando nuestra localización, monitorizando las cámaras y micrófonos y analizando los mensajes y registros de llamadas.

Por otra parte, un estudio de Opswat advierte que casi un tercio de las aplicaciones de Android de las tiendas ajenas a Google Play Store está infectada con software malicioso. Además, Android  es el objetivo prioritario de los ataques, ya que el 97% del malware móvil se dirige a atacar a este sistema operativo, según un informe de F-Secure.

Cabe recordar que el cibercrimen ya es más lucrativo que el tráfico de drogas, como señala un estudio de Norton.