Crece la flota de vehículos compartidos en plena crisis sanitaria

Strategy Analytics detecta un incremento de más del 30 % en el tamaño de la flota global de coches compartidos y en el número de miembros.

El uso del transporte público de pasajeros se ha resentido este año en lugares como España a causa de la pandemia de coronavirus.

Tanto las limitaciones de aforo como el miedo al contagio por parte de los usuarios se han dejado notar en autobuses, trenes y aviones. La crisis sanitaria está causando estragos en distintos sectores económicos.

Sin embargo, el segmento de coches compartidos se está ganando la confianza de los ciudadanos.

“A medida que el mundo continúa luchando contra la COVID-19, consumidores de todo el mundo están reconsiderando sus modos de transporte diarios. Si bien los operadores de transporte público y ride-hailing continúan teniendo problemas, los servicios de uso compartido de automóviles han experimentado una mejora bastante sorprendente en el crecimiento”, señala Strategy Analytics.

Esta compañía ha detectado ha detectado un incremento de más del 30 % en el tamaño de la flota global de coches compartidos y en su número de miembros. En concreto, la flota ha crecido un 31,7 % y las membresías, un 38 %.

Y eso que los ingresos sí que se han reducido (en torno al 14 %) como resultado directo de la pandemia.

“El uso compartido de automóviles ha sido un punto positivo en la recuperación del transporte durante la COVID-19”, explica Roger C. Lanctot, director de movilidad conectada en Strategy Analytics. “Los operadores de vehículos compartidos han satisfecho ágilmente la demanda de soluciones de transporte seguras y ad hoc”.

Se espera que la industria de coches compartidos siga mejorando a largo plazo. En 2025, por ejemplo, los expertos creen que habrá unos 700 000 vehículos ofreciendo este servicio, especialmente con motor eléctrico, y que moverán más de 5600 millones de dólares en ingresos.