Después de los microchips, la siguiente crisis tecnológica puede ser la escasez de fibra óptica

Europa sería una de las regiones del mundo más afectadas por la escasez de fibra óptica.

Desde el inicio de la pandemia la interrupción de la producción de microchips ha propiciado una escasez de estos componentes que ha afectado a diversas industrias, obligando incluso al cierre temporal de fábricas de dispositivos electrónicos o automóviles.

Pero ahora podría avecinarse una nueva escasez de un producto esencial para la tecnología como son los cables de fibra óptica, una situación que ya estaría ocasionando un alza del precio de la misma en todo el mundo, afectando especialmente a Europa.

La causa es un incremento en el precio de uno de los componentes esenciales en la fabricación de la fibra óptica como es el tetracloruro de silicio, con aumentos que han llegado hasta al 50 %. Además también e ha incrementado el precio de otro componente necesario para obtener cables de fibra óptica como es el helio, con incrementos de precio de hasta un 135 %. En este caso también influye el cierre de algunas de las plantas donde se produce tanto en Estados Unidos como en Rusia.

A lo largo del primer semestre de 2022 se ha incrementado el consumo de cables de fibra óptica en más de un 8 %, gracias al aumento en la implantación de la tecnología 5G y los nuevos centros de datos que de manera incesante inauguran grandes empresas como Amazon, Facebook, Google o Microsoft. El precio de la fibra óptica ha ido aumentando en el último año hasta en un 70 %.

Ante esta circunstancia algunos fabricantes conceden prioridad a sus clientes más importantes, como las grandes empresas mencionadas, lo que afecta negativamente a empresas de menor tamaño, para las que comienza a haber un problema importante de escasez sumado al del aumento de precio de la fibra óptica. En el caso de estas empresas más pequeñas se suma el problema de la dilatación en los plazos de entrega, que ya oscilan entre 20 y 50 semanas.

Regiones y sectores más afectados

Las regiones del mundo a las que más afecta esta situación son Europa, China e India, hasta el punto de que se dificulta el cumplimiento de objetivos y plazos en cuanto a construcción de infraestructuras y tendido de cables submarinos. La consecuencia es que se atrasarán muchos planes de transformación digital, conectividad y servicios Cloud.

Además de la industria de comunicación e informática hay otras industrias que se verán severamente afectadas. Es el caso de la industria médica en la que la fibra óptica se utiliza en laparoscopios o endoscopios, así como la industria del automóvil, que se base de fibra óptica para iluminación interior y sistemas de seguridad electrónica.