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El ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, que se comprometió a cerrar UberPop en Francia al considerar que tanto la empresa como los conductores no pagaban cotizaciones ni impuestos, impulsó el pasado viernes un proceso judicial contra este servicio, tras una protesta del sector del taxi que acusa a la compañía de competencia desleal.
Parece que los detenidos serían Thibaud Simphal, CEO de Uber en Francia, y Pierre Dimitri Gore-Coty, Director General de la compañía en Europa, acusados de cometer dos delitos.
Por un lado, se les acusa de dirigir un negocio de taxis ilegal, y por otro la policía ha asegurado que la empresa americana ha ocultado documentos digitales que no fueron encontrados cuando se realizaron las redadas en las oficinas de Uber en París.
Está claro que no corren buenos tiempos para Uber en Europa, habiendo sido prohibido en varios países, entre ellos España.
El Ministro Cazeneuve declaró tras la huelga de 3.000 taxistas contra UberPop, la filial de bajo coste del grupo Uber, que “es la ley de la jungla. Es lo que existía antes de que el derecho social protegiera a los empleados”.
vINQulos