Olvidemos el líder, el mundo corporativo necesita un ‘e-leader’

Europa tiene en marcha un ambicioso proyecto educativo. El objetivo: formar e-leaders para liderar la economía mundial digital.

Ya tenemos claro que cuando de dirigir una compañía se trata es mejor ser líder que jefe. La diferencia, entre estas dos figuras es una. El líder inspira, el jefe manda.

Pero cuando ya se habían numerado las habilidades que debe tener un líder, cuando ya se han escrito ríos de tinta y miles de tutoriales al respecto, emerge una nueva figura. La del ‘e-leader’.

Se trata de una imagen que incorpora conocimientos sobre TIC a la figura inspiradora de un líder. En fin, un líder de toda la vida más cercano a la tecnología.

Tecnologías como el Cloud Computing, la Inteligencia artificial o el Big Data son herramientas que pueden transformar radicalmente una compañía. Incorporar herramientas de análisis de datos en una empresa dedicada al ecommerce por ejemplo, puede determinar su posición en el competitivo sector.

Es el ejemplo que expone Gabriella Cattaneo, de IDC, en las jornadas sobre e-leadership que ha organizado la IE Business School en Madrid. “El principal problema al que se enfrentan las empresas de ecommerce son las devoluciones”, indica.

Con tecnología analítica podemos predecir cuántas devoluciones habrá”, lo que en efecto, se traduce en una optimización de recursos y en última instancia, en un gran ahorro de costes.

En cuanto al Cloud Computing, su democratización ha permitido a las empresas de todos los tamaños y sectores económicos tener su negocio en un centro de datos a distancia en lugar de en un servidor propio y a pagar por uso. Eficiencia y ahorro de costes.

En definitiva, la tecnología ofrece innumerables posibilidades a las empresas. Si antes la labor del líder era inspirar al equipo de TI para que hiciera bien su trabajo, la labor del e-leader es la de decidir qué herramientas integrar y a partir de ahí inspirar a toda la plantilla para actuar en la buena dirección.

Un cambio considerable.

Un proyecto político…

La imagen del e-leader no se circunscribe al ámbito teórico-literario ni sirve únicamente para llenar estanterías de la sección Liderazgo y Empresa de las librerías.

La Comisión Europea cree que la incorporación de esta figura en las organizaciones puede ser determinante para la recuperación económica y para la competitividad en la economía global digital.

Por eso ha puesto en marcha el programa E-leadership Project. La idea es la formación de expertos que sean capaces de copar las expectativas del mercado. Bruselas prevé que se crearán 864.000 puestos de trabajo relacionados con las TIC hasta 2015.

… que empieza a materializarse

Para que los e-leaders lleguen al mercado laboral, las acciones que se establecen en el proyecto de la Comisión requieren generar ofertas educativas adecuadas y la colaboración público-privada.

Así, se ha puesto a disposición de instituciones educativas y asociaciones un plan de Estudios que especifica los pasos a seguir.

La idea es que empresas del sector privado y del público pongan en común recursos para ofrecer la modernización de la educación en Europa. En definitiva, reforzar puentes ya existentes entre el sistema educativo público y las demandas del sector privado.

Otro formato son los Cursos Online Masivos y Abiertos (MOOC por sus siglas en inglés), que permiten la posibilidad de acceder a formación especializada de forma gratuita y desde cualquier parte del mundo.

Otra alternativa que plantea Europa es la de ofrecer prácticas en empresas antes de comenzar los estudios universitarios. La adquisición de habilidades empresariales mejora la empleabilidad de los jóvenes. Según datos que facilita Bruselas, el 78% de los estudiantes que lo hicieron encontraron trabajo después de graduarse en la universidad.

También se recomiendan programas de mentores e impulso a políticas que beneficien a autónomos y emprendedores. Este último punto es competencia de cada país miembro. En el caso español, el Gobierno acaba de aprobar la ley de Emprendedores y aprobó en Consejo de Ministros el anteproyecto de ley sobre crowfounding.

El éxito del proyecto es de vital importancia. Las empresas están invirtiendo en herramientas TIC para aumentar en competitividad en la economía global. Sin embargo, sin las habilidades adecuadas y sin los líderes adecuados, éstas corren el riesgo de echar a perder sus inversiones y sus oportunidades.

Y como ya dijo Neelie Kroes en su última visita a España: “Europa no puede permitirse perder el tren de la innovación”.