El 54 % de los proveedores sanitarios españoles ya usan IA para actualizar historiales médicos, pese al lastre de la tecnología heredada

El 54 % de los proveedores sanitarios españoles ya emplean IA, aunque los sistemas heredados complican la seguridad y gestión de dispositivos.
La inteligencia artificial continúa su avance en el sistema sanitario español, donde ya el 54 % de los proveedores utiliza IA para actualizar historiales médicos, según revela el nuevo informe de SOTI El dilema digital en Salud: la presión para innovar y los riesgos silenciosos. No obstante, esta transformación digital se ve limitada por el uso generalizado de tecnologías obsoletas y sistemas heredados, lo que genera riesgos en la gestión de dispositivos y en la seguridad de los datos.
A nivel global, la adopción de la inteligencia artificial en sanidad ha crecido del 61 % en 2024 al 81 % en 2025. España, aunque avanza en esta dirección, sigue rezagada en ámbitos críticos como el diagnóstico médico o los tratamientos personalizados. David Parras, director regional para el sur de Europa en SOTI, advierte que para desbloquear todo el potencial de la IA, es necesario reforzar primero la infraestructura digital de las organizaciones sanitarias.
La tecnología heredada: un freno crítico
El informe revela que el 97 % de los responsables de TI en España admite que sus organizaciones dependen de tecnología heredada, una cifra preocupante en un entorno donde la rapidez, la interoperabilidad y la seguridad son claves. Esta dependencia limita la integración de dispositivos, complica la administración remota y aumenta la vulnerabilidad frente a ciberataques.
Además, el 58 % de las entidades sanitarias españolas siguen utilizando sistemas no integrados para sus dispositivos IoT y soluciones de telesalud, frente a una media global del 65 %. Esto impide acceder en tiempo real a la información del paciente y debilita la ciberseguridad de los entornos clínicos.
Los retos de seguridad y movilidad dominan la agenda tecnológica
La seguridad de los datos se ha consolidado como la principal preocupación para el 50 % de los responsables de TI en sanidad en España, ligeramente por encima de la media global (43 %). A esto se suma la complejidad de gestionar dispositivos compartidos, que es vista como el mayor reto por el 13 % de las organizaciones consultadas.
Por otra parte, casi 4 de cada 10 organizaciones no pueden ofrecer soporte remoto ni desplegar nuevos dispositivos o impresoras, según el estudio. Esta carencia ralentiza la transformación digital y genera una sobrecarga operativa en los equipos de soporte técnico. Reino Unido, Canadá y Australia lideran el ranking de dificultades en la gestión de dispositivos, aunque España no queda exenta.
La respuesta: soluciones de gestión de movilidad empresarial (EMM)
Ante este escenario, SOTI propone dejar atrás los sistemas tradicionales de gestión de dispositivos móviles (MDM) y adoptar soluciones avanzadas de Gestión de Movilidad Empresarial (EMM). Estas plataformas permiten una administración centralizada, mayor visibilidad operativa, resolución de incidencias en remoto y cumplimiento normativo, aspectos cruciales en el entorno sanitario actual.
Shash Anand, vicepresidente senior de Estrategia de Productos en SOTI, sostiene que “la IA no puede desplegarse de forma efectiva si la base tecnológica no es sólida”. En su opinión, cerrar la brecha tecnológica es urgente para proteger la información del paciente, optimizar los procesos clínicos y mejorar los resultados sanitarios.
Aunque la adopción de la IA en sanidad avanza en España, con claros beneficios en la actualización de historiales médicos y la atención remota, la persistencia de sistemas heredados frena la innovación y eleva el riesgo digital. Reforzar la infraestructura tecnológica y adoptar soluciones EMM es el próximo paso imprescindible para consolidar un sistema sanitario más eficiente, seguro y centrado en el paciente.