Los planes para convertir el Sony Building de Manhattan en un espacio de ultralujo pasan ahora por vender la torre a nuevos propietarios por más de 1.400 millones de dólares, tal y como apunta Bloomberg.
La antigua sede de Sony, que los inversores Joseph Chetrit y David Bistricer adquirieron en 2013 por 1.100 millones de dólares, pasará a manos de una firma de inversión de Arabia Saudí.
Los compradores tienen la intención de mantener el edificio como espacio de oficinas, de acuerdo con un comunicado oficial.
Mientras tanto, Sony sigue luchando por salir a flote tras las pérdidas en su negocio móvil. En los últimos resultados de la compañía, los ingresos del área móvil han caído un 14,7% hasta los 384.500 millones de yenes (3.200 millones de dólares).
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