El panorama de LTE, la banda ancha móvil

Como dispositivos inteligentes conectados más vendidos del momento, los smartphones han revolucionado la forma de comunicarse de las personas y los propios servicios que ofrecen las operadoras, con mención especial para la tecnología 4G LTE.

Los números no engañan. A día de hoy los smartphones son los dispositivos informáticos preferidos de los usuarios, muy por encima de cualquier otra alternativa que les sirve para comunicarse y navegar por la Red. En 2014 se superaron los 1.300 millones de teléfonos móviles inteligentes distribuidos a lo largo y ancho del mundo, de acuerdo con un recuento publicado hace bien poco por la consultora IDC, que está convencida de que el boom se seguirá prolongando durante unos cuantos años más. Así, por ejemplo, dentro de un lustro las ventas de este tipo de dispositivos deberían rozar ya los 2.000 millones de unidades frente a los 121 millones que se esperan para los sobremesas.

A los móviles al uso hay que sumarles las opciones de pantalla más amplia que ofrecen las tabletas, o incluso los phablets, esos gadgets a medio camino entre una y otra cosa que a pesar de sus dimensiones ampliadas respecto a las de un smartphones permiten igualmente realizar llamadas de teléfono.

Esto amplía las posibilidades de elección para los usuarios modernos, que quieren conectarse en cualquier momento, sin importar el lugar, y cargar en sus bolsos o bolsillos dispositivos más bien ligeros y libres de cables. También intensifica la obligación de satisfacer estos requisitos que alteran las reglas de un juego que en el pasado confiaba en el acceso desde un PC emplazado sobre una mesa y enganchado a la toma de corriente eléctrica más cercana. Internet ya no es una característica exclusiva de las computadoras de escritorio, ha dado el salto a la calle de la mano de redes inalámbricas, hotspots gratuitos y tarifas de datos cada vez más competitivas. Y, por supuesto, terminales preparados para ello.

Casi 500 millones de conexiones LTE

La sociedad ha evolucionado en nivel de exigencia y caudal de conocimientos, y la tecnología ha tenido que hacerlo con ella. El pasado mes de marzo, la asociación 4G Americas en la que se integran firmas de renombre como Cisco, Ericsson, HP, Intel, Nokia, Qualcomm o Telefónica con su preocupación puesta sobre la banda ancha móvil celebraba que se estuviese a las puertas de los 500 millones de conexiones LTE por despliegues en 367 redes en 121 países diferentes. En un año, el número de conexiones se ha multiplicado por cerca de 2,5. Y, aunque la región que más contribuyó a tal crecimiento en 2014 fue Asia-Pacífico, con 152 millones, Norteamérica sigue aportando la mayoría de las conexiones.

De hecho, 4 de cada 10 conexiones móviles disponibles en esta zona de América se corresponden ya a suscripciones LTE. Y en países muy concretos como Estados Unidos el ratio de cobertura es brutal, al abarcar a unos 300 millones de personas. Para hacerse una idea del impacto, basta con recordar que el número total de estadounidenses se cifra en alrededor de 320 millones. Tampoco hay que olvidar que, con una mejoría anual del 488% en 2014, Latinoamérica comienza a despertar hacia esta realidad tecnológica. Y, mientras tanto, ¿qué ocurre en el Viejo Continente? Europa no se queda atrás. Su parte occidental se destapa como el segundo mercado más potente en LTE, con una cuota del 13%.

Para completar esta visión general sobre cómo avanza la movilidad de un lado a otro del planeta, aún podemos arrojar algún dato adicional. Las conexiones celulares llegan a 7.100 millones. Las suscripciones 3GPP suben hasta 6.700 millones. Y las de banda ancha móvil HSPA más LTE se aproximan a los 2.000 millones. Por cierto, también existirían 54 redes en 35 países para LTE-Advanced, que subirían a 56 para 36 si nos guiamos por la actualización de 4G Americas para principios de abril.

Fuente-Shutterstock_Autor-lassedesignen_smartphone-movilLTE-Advanced es una versión del estándar LTE o Long Term Evolution que llega para introducir cierto salto de calidad sobre lo que ya existía, con ventajas que se antojan obvias como una velocidad mayor que es capaz de habilitar la nueva forma de vida de los usuarios. Es lo que algunos identifican como el 4G real. Desde la UIT se habla de LTE como de esa tecnología que concede 100 Mbps de bajada pico de forma instantánea para el espectro de 20 MHz, que serían 50 Mbps como mucho en el caso de la subida. Además, LTE se caracteriza por conceder un ancho de banda escalable que se mueve por los 20 MHz, los 15 MHz, los 10 MHz, los 5 MHz, los 3 MHz y hasta el límite de 1,4 MHz.

VoLTE, VoIP, el streaming de vídeo y otras posibilidades

Partiendo de esta realidad como base, Google ha decidido presentar su propia propuesta de servicio inalámbrico, bautizado como Project Fi y todavía en una fase inicial. Su idea es ofrecer conexión constante y con la máxima rapidez posible, volcando el número de teléfono de los usuarios en la nube y alternando el enganche de los terminales entre ciertos puntos de acceso y las redes 4G LTE de Sprint y T-Mobile. Y hasta propone devolver a sus clientes el importe que no agoten de los datos mensuales. Es una plataforma nueva que podría cambiar la forma de servir la movilidad a la gente en cuanto acepte a más terminales que el Nexus 6. Y también si acaba poniendo pie en el extranjero.

Y es que Project Fi, de momento, es una exclusiva de Estados Unidos. Quien tiene un carácter más internacional es WhatsApp que, siguiendo la estela de herramientas rivales como el Skype de Microsoft y el Hangouts de la propia Google, ha decidido introducir por fin las llamadas de voz desde móviles. Tanto desde dispositivos Android como en el iPhone de Apple. Poder usar este tipo de aplicaciones para algo más que las comunicaciones de texto instantáneas y gratuitas, porque se aprovechan de la existencia de una conexión Wi-Fi cercana o del plan de datos que el usuario contrata con su operadora, revaloriza su existencia.

El VoIP se propone como alternativa a las llamadas tradicionales y habrá que ver cuál es su calidad final y de qué manera afecta a las tarifas de las telcos. Si a la ecuación le añadimos la posibilidad de ver al interlocutor en tiempo real, a medida que se habla y a pesar de la distancia física que lo separa con la otra persona mediante el uso de la cámara, el futuro se vuelve aún más interesante. Otro punto de atención que se genera con el perfeccionamiento de la banda ancha móvil es VoLTE o la Voz sobre el mismísimo estándar LTE que pueden aprovechar las compañías para promover charlas más directas y con menos ruido.

Pero hay más, bastante más. Entre los negocios de operadoras tradicionales, OMVs u operadoras móviles virtuales y el OTT de compañías que alientan el contenido over-the-top se generan cuantiosas oportunidades. Hoy en día se puede navegar por la web desde el móvil sin mayores problemas, acceder a juegos, transferir archivos a la nube, escuchar música en streaming y, claro está, consumir ese material rey de exigencia notable que es el vídeo, también en streaming, en vivo o bajo demanda.

El caso de España

En España se está dejando sentir la demanda de este tipo de servicios que tiran de datos. Las tres principales operadoras, las que históricamente han copado el mercado, Movistar, Vodafone y Orange, han extendido sus despliegues de red para 4G al menos por las ciudades de mayor tamaño. Vodafone ya hablaba el 1 de abril del año pasado de una cobertura que alcanzaba a todas las capitales de provincia, más Ceuta y Melilla. Si consultamos la situación de una empresa como Orange en la actualidad, se señala que hay servicio para el 70% de la población; mientras que Movistar estaría dando 4G+ para Madrid y Barcelona. En la lista 4G+ de Orange aparece asimismo Valencia, algo que Vodafone amplía a A Coruña, Bilbao, Málaga, Sevilla y Zaragoza.

Yoigo, que fue de las primeras en favorecer la tecnología 4G en España, viene de meter presión a sus rivales móviles con el lanzamiento de La Tarifa Sinfín de 29 euros mensuales a cambio de llamadas ilimitadas y también datos ilimitadas. De ellos, los 20 GB iniciales se asocian a la alta velocidad.

Fuente-Shutterstock_Autor-jules2000_4G-LTE¿Y el resto? Los demás representantes del sector no se quieren quedar fuera. Por ejemplo, Pepephone ha decidido asociarse con Movistar, tras un primer intento de cambiar Vodafone por Yoigo, y ya está reemplazando las tarjetas SIM de sus clientes y realizando migraciones a Pepephone 4G. Esto debería permitirle competir a otro nivel y, por supuesto, aportará mayor variedad de elección los usuarios más urbanitas. Y es que historia aparte es lo que ocurre en el rural con todo este tema de la banda ancha móvil.

Aunque durante el cuarto trimestre de 2014, la velocidad de conexión media que ofrecieron las redes móviles de nuestro país se fijó en los 4,4 Mbps, según mediciones de Akamai Technologies, tan sólo un trimestre antes se estaban sobrepasando los 5 Mbps. Y ahora que avanzamos por las promesas de un nuevo año y cabe esperar cambios, habrá que comprobar si se logra recuperar el terreno perdido. Por lo pronto, buena parte de las conexiones se producen a más de 4 Mbps. Y en velocidad de conexión media pico para un sólo trimestre hemos llegado a marcar en algún momento de 2014 los 31,2 Mbps. Ésas son las referencias a seguir.

Os recordamos que esta misma semana NetMediaEurope emitirá un evento online moderado por nuestra compañera Rosalía Arroyo que tendrá como hilo conductor a la tecnología 4G LTE. En él analizaremos su papel actual a modo de motor que influye en la creciente adopción móvil alrededor del mundo al ofrecer, entre otras cuestiones clave, una mayor velocidad y una menor latencia que soluciones anteriores. Eloy Fustero, director de desarrollo de negocio en Qualcomm y Jorge Tosar, responsable de soluciones empresariales en Huawei, serán nuestros invitados en esta ocasión. ¡Apúntate!