Europa da un ultimatum a gobiernos, telecos y automovilísticas sobre el ‘ecall’

La adopción del ecall, el botón de llamada que incorporado en los automóviles continentales alertará de la posición de los vehículos cuando sufran un siniestro importante, transcurre mucho más lenta de lo que Europa desearía. Según las estimaciones de la Comisión, 2.500 vidas podrían salvarse cada año si se hubiese introducido ya el servicio.
Pero los costes y las complicaciones llevan a que telecos, automovilísticas y gobiernos, las tres partes implicadas, dejen correr el asunto; aunqiue pronto podrían verse obligadas a tomar decisiones importantes… y a hacer inversiones en la materia. Viviane Reding, la comisaria de Sociedad de la Información y Medios de Comunicación, ha decidido tomar cartas en el asunto.
“Todavía sigue muriendo demasiada gente en las carreteras europeas”, ha acusado recordando que “cada semana oigo hablar de accidentes en los que ecall habría ayudado”. “Quiero ver los primeros automóviles con ecall en nuestras carreteras el año que viene: si la implantación de ecall no se agiliza, la Comisión está lista para fijar unas normas claras que obliguen a actuar a los Gobiernos, a la industria y a los servicios de urgencia“, ha anunciado.
Reding noestá muy contenta con la situación. “Los europeos no deberían tener que seguir esperando un sistema que puede salvar sus vidas solo porque sus Gobiernos no actúan”, destaca.
Por ello, ha emplazado a industria y países a pasar “de las palabras a la acción” y ha amenazado con tomar la sarten por el mango si las cosas no cambian.
La Comisión cuenta por tanto con unas pautas políticas sobre cómo debe actuar industria y administraciones para incorporar el servicio. El botón ecall llama automáticamente al 112 y da las coordenadas de los accidentados, lo que permite reducir en un 10-15% la gravedad de las lesiones, según datos de Europa.
Seis países ( Dinamarca, Francia, Irlanda, Letonia, Malta y  Reino Unido) no apoyan el servicio por una cuestión de costes (menos de 100 euros por vehículo, según la Comisión, que además señala que hay ventajas asociadas para industrias como la de servicios de telecomunicaciones). Otros quince comunitarios, entre ellos España, y otros tres extracomunitarios (Islandia, Noruega y Suiza) ya han firmado el acuerdo.