Google hace pública su huella de carbono

Durante 2011, el gigante de las búsquedas emitió a la atmósfera un total de 1,67 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono.

Hace un año, Google decidía revelar por primera vez en su historia los datos referentes a su huella de carbono. Y ahora ha decidido seguir con este código de conducta transparente publicando la información relativa a todo el año 2011 en su sitio Google Green y asegurando que “estamos centrados en hacer nuestro trabajo con un impacto negativo mínimo en el cambio climático”.


“Nos gusta la precisión, así que, cuando calculamos nuestra huella de carbono, no nos limitamos a los parámetros típicos”, explica Rick Needham, Director de Energía y Sostenibilidad en el gigante de Mountain View. “No sólo observamos los viajes de negocios de nuestros empleados, sino también el traslado diario de casa al trabajo. Controlamos los kilómetros recorridos por nuestros coches sin conductor y los vehículos de Street View y, en lo referente a nuestros centros de datos, analizamos meticulosamente cada detalle”.

Esto atañe la construcción de nuevos servidores e instalaciones, así como la energía consumida en datacenters de su propiedad y en instalaciones alquiladas o de terceros que alojan su equipamiento en todo el mundo.

En total, la huella de carbono de Google el año pasado fue de 1.677.423 toneladas métricas de CO2e, antes de compensarla, frente a los 1,46 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono de 2010. El aumento es justificado por Google como “consecuencia normal de proporcionar más y mejores servicios a nuestros consumidores” pero “dicho consumo está creciendo con menos rapidez que nuestra actividad. Nuestra huella de carbono por millones de dólares de ingresos -una medida de la intensidad de emisión de dióxido de carbono usada habitualmente para observar la sostenibilidad corporativa- ha disminuido una media del 10% cada año desde 2009”, señala Needham.

Asimismo, la compañía de la G ha logrado limitar la cantidad de energía empleada en refrigeración de centros de datos y actividades parecidas un 13%. Y destaca el apogeo de sus programas de sostenibilidad, con un aumento del 60% en el uso de microbuses y 350.000 kilómetros recorridos por sus trabajadores para desplazarse a la oficina en su flota de coches híbridos y eléctricos.

“La combinación del sistema de microbuses para los empleados con nuestra infraestructura de vehículos eléctricos equivale a sacar de la carretera 3.000 coches cada año”, compara el directivo, que se siente especialmente orgulloso “de disponer de un área de edificios de más de 1.828.800 metros cuadrados repartidos por el mundo que persiguen la consecución de la certificación LEED (Liderazgo en Diseño Medioambiental y Energético)”.