Google quiere ser segundo proveedor Cloud a corto plazo

El negocio actual en la nube representa tan sólo un 5 por ciento de lo que está por llegar. Una oportunidad que Google no quiere dejar escapar con su división para empresas.

Google celebró la semana pasada su evento Google Cloud Next 2017 en San Francisco, un congreso en el anunciaba importantes novedades y dejaba clara su fuerte apuesta por el negocio de nube pública, donde quiere llegar a ser número dos mundial “en un corto espacio de tiempo”. Así lo afirmaba Isaac Hernández, director general de Google Cloud para España, durante una rueda de prensa para acercar a los medios de comunicación los principales mensajes de dicho congreso.

En la actualidad, compite frontalmente con empresas como AWS, Microsoft (Azure) e IBM, y lo hace con más de 17.000 empleados –principalmente ingenieros- dedicados en exclusiva a la división Google Cloud. En total, más de 5 millones de empresas han contratado alguno de los 7 servicios principales en los que se divide su oferta en la nube. En este sentido destaca el acuerdo alcanzado con el grupo BBVA, pionero a la hora de migrar sus cuentas de correo a la plataforma de Google hace ya algunos años. Sin embargo, la principal característica de los servicios de Google (y de todos los basados en cloud) es que cualquier empresa puede tener acceso a lo último en tecnología sin necesidad de desembolsar grandes cantidades de dinero desde el primer momento.

El crecimiento experimentado durante los últimos años se debe a diversos motivos, tal y como señalaba el directivo. Más allá del crecimiento orgánico, ha ido realizando adquisiciones de empresas y tecnologías consideradas como estratégicas. Durante el Cloud Next 2017, anunciaba la compra de la mayor comunidad de científicos de datos del mundo, Kaggle, con la que pretende “democratizar el uso de la inteligencia artificial”.

Isaac Hernández es director general de Google Cloud España
Isaac Hernández es director general de Google Cloud España

Pero para tener éxito en este competitivo y vertiginoso mercado, también es necesario llegar a acuerdos con otros fabricantes especializados, como es el caso de SAP. A partir de ahora, será posible contratar la plataforma SAP HANA  dentro de la nube pública de Google para llevar a memoria todos los datos y las aplicaciones de las empresas, lo que se traduce en un acceso prácticamente en tiempo real a la información.

Otro de los puntos fuertes de Google es su capacidad para desplegar nuevos centros de datos alrededor del mundo. En esta ocasión han sido tres nuevas regiones las anunciadas por la compañía (California, Montreal y Países Bajos) para un total de 20. “En los últimos tres años hemos invertido 30.000 millones de dólares en nuestros datacenters”, declaraba Hernández. Entre otras características, se reduce la latencia de las aplicaciones empresariales mientras se incrementa la escalabilidad.

La economía de las APIs no es un término acuñado por Google, pero la compañía tiene mucho que ver en esta creciente forma de desarrollar nuevas aplicaciones. A todos nos viene a la cabeza la API de Google Maps, pero son cientos las piezas de código que la compañía pone a disposición de los desarrolladores mediante estándares abiertos. La última API en ver la luz ha sido la denominada Cloud Video Intelligence, con la que es posible buscar y descubrir rápidamente contenido de vídeo, así como todos los elementos que se encuentran en las propias secuencias. Está basado en su motor de Deep Learning y supondrá un antes y un después a la hora de buscar vídeos, traducirlos en tiempo real, reconocer imágenes, personas, etc.

Por último y aunque aún se encuentra en fase beta pública, es reseñable la puesta en marcha de Google Cloud Functions, un entorno con el que las organizaciones pueden desplegar sus aplicaciones y servicios sin necesidad de preocuparse por la infraestructuras. No importa cuántos servidores o memoria se necesiten ya que estos procesos los realiza la propia plataforma de forma automática e inteligente. Es el siguiente paso para que las empresas se olviden de todo menos de lo que realmente importa: el núcleo de su negocio.