La Audiencia Nacional acaba de reabrir una herida que ya parecía cicatrizada para Oracle. La Sala de lo Social ha ordenado a la CNMC que sancione a Oracle por abuso de posición dominante.
El caso se remonta a 2011, cuando HP denunció a Oracle Corporation y Oracle Ibérica por infringir las normas de Competencia al concluir el soporte a los procesadores Itanium de Intel que HP usaba en sus servidores Integrity.
Tras acordar la puesta en marcha del proceso legal, la ya extinta Comisión Nacional de Competencia (CNC) consideró en 2013 que no había existido ninguna infracción.
Dos años después, la Audiencia Nacional ha considerado la nula esta resolución y ha devuelto a la sala de Competencia del superregulador el caso. En la sentencia se pide expresamente la realización de un “juicio culpabilístico procedente” y la toma de “medidas accesorias que se consideren necesarias”.
En concreto, y como recoge Europa Press, el tribunal cree que la decisión del fin del soporte a Itanium tuvo en el negocio de HP un “efecto de salida del mercado que acredita el abuso de posición de dominio”. Oracle tomó la decisión tras la adquisición de Sun Microsystems, uno de los principales rivales de HP en el segmento de servidores.
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