La invasión Doraemon

Sé de buena tinta que Doraemon se está preparando para invadir la Tierra aliándose con Starbucks. ¿O quizás ya ha pasado? Porque aparte de los millones de Starbucks que están apareciendo como setas por toda la geografía planetaria, también hay una plaga de dispositivos Doraedemonizados: teléfonos Doraemon, sofas Doraemon, relojes Doraemon, lámparas Doraemon, almohadas Doraemon, helicópteros Doraemon, calamares en su tinta congelados Doraemon, papel higiénico Doraemon (no confundir con el papel higiénico ninja), vibradores Doraemon (que no Hello Kitty)… hazte a la idea, esto es un mundo Doraemon y tú sólo vives en él porque ÉL, en su omnipotencia, así lo quiere. Y ahora, lo que Doraemon quiere es que compres su nueva webcam, con la forma de Doraemon y su hermana Dorami, el tacto de un peluche, un llavero y la capacidad de transmitir todo lo que capte a un ordenador central en un punto desconocido de la Nebulosa del Cangrejo. Sí, incluso esas imágenes que mandaste a Chica_Timida_Sin_Depilar69@hotmail.com (que en realidad es conductor de trenes de mercancías y responde al nombre de Romualdo). Cómprala y hazlo ya, si no quieres ser deshidratado para fabricar frappuccinos. Como Doraemon es comprensivo, en su infinita paciencia, te dejará esperar hasta que sus androides esclavos hechos en Hokkaido anuncien el precio.

A Doraemon webcam (the sequel) [Akihabara]