La tecnología está especialmente diseñada para emplearse en áreas remotas como desiertos, donde no es posible instalar estaciones para telefonía móvil. La compañía lanzó recientemente el servicio en Tanzania y Ecuador.
Según cuenta el fundador de TerraNet Anders Carlius, la idea la tuvo cuando estando en un safari en Tanzania, comprobó la nula conectividad con otros compañeros situados a solo unos metros de distancia.
Cada teléfono tiene un alcance efectivo de un kilómetro y además sirve como el nodo de una red aumentando esa distancia. Si hay suficientes teléfonos la red de radio se multiplica además de poder conectar a otras redes a través de un PC.
Sin embargo Carlius admitió que “las operadoras no estaban demasiado interesadas, por considerar que la tecnología no tenía un modelo comercial aplicable”. A pesar de ello el fabricante Ericsson habría invertido tres millones de libras en TerraNet.
vINQulos
BBC