Los datos bancarios de 12,5 millones de personas, al descubierto

Tras reconocer el pasado mayo la pérdida de los datos personales de 4,5 millones de clientes, el Bank of New Yok Mellon acaba de anunciar que la cifra de afectados se eleva, en realidad, hasta los 12 millones y medio de personas.
La pérdida se produjo en febrero y en el estado de Conética, durante el transporte de unos soportes de almacenamiento no encriptados con los datos de los clientes.
“Las enormes dimensiones de esta pérdida de datos afectan no sólo a cientos de ciudadanos y negocios de Conética, sino a millones en toda la nación”, puntualizó a este respecto una congresista de este estado en declaraciones a Reuters.
La entidad intenta tranquilizar desde su oficina virtual a los clientes afectados, asegurando que desde el momento de la desaparición no han tenido constancia del uso fraudulento de esta información y recordando su condición de líderes en seguridad y protección de datos.
Estos datos, aún así, no tranquilizan a unos ciudadanos que han visto como su información de la seguridad social, su fecha de nacimiento, su nombre y su domicilio se perdían sin saber su destino y que podían, por tanto, caer en manos de la delincuencia organizada.
Tras el desmentido de Best Western sobre la pérdida de información sobre 8 millones de clientes, éste podría convertirse en el mayor agujero de seguridad de la historia.