“Que hablen mal, pero que hablen” ya no sirve en Google

Esta decisión ha surgido a raíz de un reportaje publicado por The New York Times en el que se demostraba que compañías con un elevado número de comentarios negativos subían a los primeros puestos de las búsquedas en Google.

La razón es muy simple, el buscador no distingue entre críticas y alabanzas de los consumidores, de manera que los comentarios negativos hacen aumentar también la visibilidad de la empresa.

Desde el buscador aseguran que el equipo “se horrorizó” al darse cuenta de que “ser malo en Internet podía ser bueno para el negocio” y desde ese mismo momento decidieron cambiar la forma en la que ordenan los resultados para no beneficiar a “comerciantes sin escrúpulos”.

Con el nuevo algoritmo Google quiere poner a cada uno donde se merece y no beneficiar a empresas que dan al usuario una “experiencia extremadamente pobre al usuario”, según explica Amit Singha, ingeniero jefe de Google.

vINQulos

The New York Times