¿Quién es Steven Sinofsky?

Reúne las características de un líder. Quienes le conocen y han trabajado con él hablan de una difícil personalidad y algún empleado le tacha de “cáncer”. Pero hasta su mayor detractor no duda que es “brillante” (recuerda levemente a una descripción de Steve Jobs). Su eficiencia y perseverancia han valido para ganarse la confianza de Gates y Ballmer. Tampoco puede negarse su capacidad de trabajo y su compromiso con los plazos, un rasgo vital en el sector TI.

Un ejemplo ilustrativo: después de “arreglar” todos los desastres que acumuló el Windows Vista, Microsoft necesitaba un lavado de cara inmediato. El fiasco del Vista había que solucionarlo, y hacerlo además en el menor tiempo posible. Se puso de plazo máximo la época navideña.

En octubre de 2009 ya estaba listo. Sinofsky y su equipo presentaron un Windows 7 mejorado y listo para insertarse en decenas de millones de dispositivos. Tras el desastre anterior, el tirón de las ventas de navidad animó a los fabricantes e inversores, les devolvió la confianza en el gigante de software.

Su trabajo le valió la confianza de Ballmer, y también la de Gates, que sigue muy de cerca los pasos de la compañía, aunque desde fuera de la misma. Es por esto que en 2009 Ballmer lo promocionó como presidente (Ballmer fue presidente durante tres años, antes de convertirse en CEO).

Entonces, y lejos de tomarse un respiro Sinofsky se plantó un reto, con fecha límite: finales de 2012. Microsoft tendría que desarrollar un sistema operativo competente, que se ajustase a las nuevas características del mercado que Apple empezaba a dibujar: dispositivos táctiles, con larga duración de batería y con una interfaz sencilla. En definitiva, había que hacer algo “radicalmente humano”, según apunta Business Insider.

Como siempre, Sinofsky ha cumplido los plazos: hoy presenta la beta de su Windows 8, un paso vital para los de Redmond, inexcusable para mantenerse en la vanguardia. Un paso importante para el ejecutivo, que a no ser que resulte un fiasco, le abrirá el paso para ser CEO de la compañía.