Solamente un 1-2 % de los datos que se crean cada año acaba almacenado

Todo lo demás, es decir, la gran mayoría de los datos, se analiza al instante y se entrega para su consumo.

Solamente una pequeña porción de los datos que se crean o replican cada año acaba almacenada durante un periodo de tiempo.

El porcentaje está entre el 1 % y el 2 %, según la consultora IDC, que dice que todo lo demás es analizado al instante y se entrega para su consumo. Y, en ese sentido, la mayoría de los datos generados nunca se guarda para un acceso posterior.

En cuanto a la base mundial instalada de capacidad de almacenamiento, parece que se multiplicará por más de dos desde la cifra de 2018 a 2023, cuando debería alcanzar los 11,7 zettabytes. Y, aunque diferentes partes del mundo contribuyen a ello, la región de Asia-Pacífico destaca sobre el resto y debería concentrar el 39,5 % en 2023. Los expertos explican que el mayor crecimiento se produce allí donde hay centros de datos en la nube.

“Se confía cada vez más en que las empresas, especialmente en los proveedores de nube, para el almacenamiento y la administración del repositorio de datos mundial”, indica John Rydning, vicepresidente de investigación en IDC. Esto significa que las empresas adelantan a los consumidores en capacidad de almacenamiento que es gestionada.

Si todo va según lo previsto, en 2023, año final de las predicciones de IDC, las organizaciones gestionarán más de tres cuartas partes de la base instalada de capacidad de almacenamiento que exista.