Sony trata de calmar los ánimos pero comienzan a llegar las denuncias

Este ataque “es un acto criminal”, aseguran desde la compañía, “y estamos procediendo de manera muy agresiva para encontrar a los responsables”.

Sony está en el punto de mira después de que la plataforma PSN fuera atacada y los datos de más de 70 millones de usuarios se hayan visto comprometidos.

La mayor preocupación es el riesgo que pueden correr los datos bancarios ya que algunos afectados están denunciando cargos en sus tarjetas. En este sentido, Sony asegura que “la totalidad de la tabla de tarjetas de crédito estaba encriptada” y añaden que por el momento no hay pruebas de que esta información haya sido robada.

Sin embargo, reconocen que “los números de tarjeta de crédito (excluyendo el código de seguridad) y la fecha de caducidad pueden haber sido obtenidos” por lo que recomiendan a los usuarios revisar sus movimientos para detectar cargos sospechosos.

Las denuncias por este estrepitoso fallo de seguridad no se han hecho esperar. Un usuario de EE.UU ha sido el primero en abrir la veda interponiendo una demanda contra Sony en California. Varias organizaciones de consumidores y reguladores de la privacidad también han iniciado sus investigaciones para determinar si Sony ha violado las leyes que velan por la protección de datos.

Seguramente veamos una avalancha de denuncias, aunque Sony se escudará en los términos de uso donde advierten de que excluyen toda responsabilidad “por pérdida de datos o acceso no autorizado a las cuentas Sony Online Network”

De momento esta partida tiene un claro perdedor que son los usuarios, pero la posible multa millonaria y el desprestigio de la imagen de Sony puede marcar un antes y un después en la historia de la compañía.

 

vINQulos

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