Telefónica recicla los viejos cables de cobre y gana 131 millones de euros

Con la sustitución de las viejas instalaciones de par de cobre por la nueva tecnología de fibra óptica Telefónica se está encontrando un beneficio inesperado: obtener dinero por el reciclaje del cobre.

Así, además de poder aumentar la calidad y la capacidad de la conexión, una vez sustituido el cobre, al reciclarse  tanto los cables como otros materiales procedentes de la sustitución y la renovación de las antiguas centralitas se pueden obtener ingresos por la nada desdeñable cantidad de 131 millones de euros tan sólo por la venta de cobre durante el año 2020.

Y es que durante la primera mitad de 2021 Telefónica ha cerrado mil centrales de cobre como parte de su plan de digitalización y transformación de la red, un plan con el que tiene previsto tener cubierta la totalidad del territorio español para el año 2025, en paralelo con el despliegue de la tecnología 5G en España.

65.000 toneladas de cobre recicladas

Con el desmantelamiento de las centrales de cobre, iniciado en el año 2016, Telefónica ya ha recuperado 65.000 toneladas de cobre y más de 7.000 toneladas de otros residuos procedentes de esas instalaciones.

Por otra parte, la sustitución de la red de cobre por fibra óptica también reporta importantes ventajas en cuanto al consumo energético por los menores requerimientos de la fibra, que es un 85 % más eficiente, suponiendo la reducción de 355.000 toneladas de CO2 en emisiones a la atmósfera.

Y por si fuera poco también es necesaria menos cantidad de fibra para ofrecer el servicio, puesto que si para la conexión a Internet de 2.400 clientes eran necesarios 2.400 pares de hilos de cobre con la fibra bastan 256 cables para ofrecer servicio a 16.384 clientes, necesitando además una central de fibra apenas el 15 % de espacio que una central de cobre.

La cobertura de la red de fibra óptica de Telefónica llega ya a más de 26 millones de hogares, existiendo más de 12 millones de abonados a esta tecnología.