Un grupo de anunciantes que emplearon la plataforma Google AdWords entre los años 2004 y 2008 verá como su demanda colectiva sigue adelante, después de que el Tribunal Supremo de EE.UU. haya desestimado la apelación de la compañía de Mountain View.
Según se expone en la demanda colectiva, Google les engañó sobre los lugares en los que se ubicarían sus anuncios, violando con ese comportamiento las leyes de publicidad justa del estado de California.
En concreto, señalan que Google nunca les explicó que sus anuncios se verían en páginas de error y otros espacios no deseados.
Hay que recordar que en 2012 un juez federal declaró que los anunciantes no podían presentar una demanda colectiva porque las indemnizaciones que les podrían corresponder serían diferentes para cada demandante, pero más tarde una corte de apelaciones anuló esa decisión y concluyó que el proceso judicial podía seguir adelante.
Ante ese panorama, desde Google decidieron presentar un recurso de apelación con el fin de evitarse pasar por los tribunales, pero tras la decisión dada a conocer hoy por la justicia norteamericana no podrán librarse de ello, informan en ZDNet.
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