Con el ambicioso objetivo de multiplicar exponencialmente su crecimiento, LoJack quiere tener instalados en México unos 60.000 de sus dispositivos a finales del año que viene.
Su Black Jack se coordina con las policías municipales, estatales y federales, de ahí ese breve plazo de tiempo, apenas una hora y media de promedio, que tarda el vehículo robado en ser localizado.
La intimidad de los propietarios de los vehículos en los que se instala permanecen a salvo puesto que hasta que no se activa el dispositivo por el robo no se monitoriza el seguimiento mediante GPS del mismo.
Black Jack se contrata con un período inicial de duración del servicio de tres años a cambio de unos 6.500 pesos. De no recuperarse el automóvil la empresa LoJack abonará un mínimo de 20.000 pesos.
Durante el pasado año se recuperaron 2.000 vehículos en los 32 países en los que ya está persente este servicio. México ocupa el quinto lugar del mundo en robo de automóviles y no hay previsión de que descienda ese nivel de delincuencia.
En caso de robo el propietario del automóvil debe comunicarlo a la empresa y denunciarlo ante las autoridades, momento a partir del cuál se activa la señal de seguimiento del vehículo. Cuando se localiza su paradero se comunica a las autoridades policiales de la zona para que procedan a su recuperación. ─[El Universal]
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