Flow, el mando háptico con múltiples sensores

Aunque los usuarios de ordenadores siguen usando mayoritariamente el teclado y el ratón, la expansión de las pantallas táctiles y los trackpads han provocado que cada vez se más habitual ver otros sistemas de control alternativos e innovadores. A esto le tenemos que sumar sistemas como el Wiimote, Kinect y casos más recientes como el Leap Motion y Myo.

En esta ocasión Flow nos propone un sistema menos espectacular, pero quizás más útil y preciso. Se trata de un pequeño cilindro sin cables, ya que utiliza Bluetooth 4.1 y una batería desmontable de 4 meses de autonomía, y que dispone de varios sensores.

Entre los sensores de Flow contamos con un panel táctil capacitivo, un sensor para medir el ángulo de posición de su anillo externo, un sensor de luminosidad y otro sensor basado en infrarrojos para reconocer gestos hechos con la mano. Con todos estos sensores, la capacidad de control de Flow es enorme, ya que además cuenta con una SDK open source para poder programarlo tal como queramos, junto con cientos de controles ya configurados tanto para programas y juegos concretos, como para funciones estándar.

Por ejemplo, podemos usar el panel táctil como ratón o como atajos tocando posiciones concretas. El anillo externo permite movernos por menús o seleción ángulos con mucha precisión. El sensor de infrarrojos incluso da la posibilidad de usar gestos tridimensionales con la mano. Pero lo mejor es que al contar Flow con Bluetooth 4.1, podemos usarlo tanto en ordenadores como smartphones y tablets, por lo que se convierte en un mando universal tanto en el tipo de acciones que detecta como en los dispositivos con los que es compatible.

Flow está fabricándose en Alemania y su campaña en IndieGoGo ya ha conseguido todos los fondos necesarios y de hecho la primera remesa ya se ha acabado. La segunda cuesta 99 dólares, un 35% de descuento frente al precio final en tiendas, y llegará en julio de 2015.