Intel tiene grandes planes para el Mobile World Congress

No queda mucho para el Mobile World Congress,  la feria de movilidad más importante del mundo, apenas unas semanas, y las empresas empiezan a desvelar algunas de las cosas que mostrarán durante el encuentro. Una de ellas es Intel, que lleva unos años queriendo hacerse fuerte en el mercado de los dispositivos móviles, y que empieza a ver el fruto de sus esfuerzos.

A finales de la semana pasada anunciaba el Acer Liquid C1, uno de los terminales que podrán verse en la Ciudad Condal y que incorpora un Atom Z2580 de doble núcleo. Le acompañan una pantalla de 4,3 pulgadas, cámara de ocho megapíxeles, conectividad 3G y HSPA+ y una batería que ofrece nueve horas de duración en conversación.

El Acer Liquid C1 se venderá inicialmente en Tailandia a un precio de 335 dólares, pero Acer e Intel esperan que el terminal esté disponible en otros mercados en breve.

Precisamente el Atom Z2580 será una de las estrellas de Intel. Fue anunciado el año pasado y según la compañía representa un avance tremendo respecto al Z2460, de un solo núcleo y gráficos PowerVR SGX 540. Intel asegura que el Atom Z2580 ofrecerá el doble de rendimiento que la generación anterior.

Intel anunciaba en su sala de prensa que el Mobile World Congress servirá a la compañía para mostrar “nuevas plataformas gráficas  duales y de doble núcleo”. También mostrará terminales basados en Android que funcionarán con su plataforma Atom Z2420, un chip de bajo coste y potencia para smartphones diseñados para mercados emergentes.

Intel, que reinando desde hace años en el mercado de ordenadores apenas tiene presencia en el de dispositivos móviles, donde el protagonismo es para la británica ARM, trabaja para que la situación cambien a su favor, y además de smartphones, la compañía planea mostrar tabletas con Windows 8 y convertibles que funcionan con sus procesadores.

Durante el Consumer Electronic Show que se celebró en Las Vegas a primeros de año, la compañía desveló algunos de sus planes para el mercado de ordenadores y móviles para lo que queda de año, un año al que Intel se ha referido como “un año de cambio” para la compañía.