Los sensores de olor en los asientos del conductor y del copiloto son capaces de leer los niveles de alcohol, mientras que un detector en la palanca de cambios mide la sudoración de la palma del conductor cuando empieza a manejar el coche.
Nissan no es el primero en introducir este tipo de precauciones. También Volvo utiliza una tecnología en la que los conductores soplan por un dispositivo parecido al de los controles de alcoholemia de la Guardia Civil pero colocado en el cinturón de seguridad.
Nissan va más allá. Ha colocado una cámara en el interior del vehículo que vigila el estado del conductor y que hace sonar una alarma si entiende que empieza a dormirse, por ejemplo. Si esto no funciona, le grita en japonés o en inglés que deje de conducir y se acueste un rato. Creo que en España, hasta le ofrece un café.
Lo cierto es que esta tecnología se encuentra aún en desarrollo, pero según su responsable, Kazuhiro Doi, la combinación de estos sistemas de detección va encaminada a la vigilancia permanente de la persona que va al volante.
Más información en Reuters.
Las transacciones de pago instantáneo crecerán un 161% en el próximo lustro, superando los 58…
POWERBIM ha logrado destacarse a nivel mundial gracias a su enfoque tecnológico y su visión…
Este nuevo Software Hub de Renault nace con el objetivo de liderar la revolución del…
La compañía en la que se enmarca Google ha publicado los resultados financieros de su…
Alcanzó los 61.900 millones de dólares, de los que 35.100 millones corresponden a Microsoft Cloud.
La tecnológica española registró durante el año una mejoría del 23 % respecto al ejercicio…