Según el anteriormente mencionado estudio de Red.es, en general, la mayoría de los usuarios se decanta por comprar billetes de avión, tren y demás medios de transporte. Otros productos que interesan son las entradas a los espectáculos y los libros. Pero estos no son los únicos y es que hay una larga lista de artículos que los españoles adquirimos en Internet, ya que en la Red se puede encontrar de todo. Según el estudio, para llegar a los productos que queremos, la mayoría accedemos usando el buscador generalista, aunque también nos dirigimos, pero en menor medida, directamente al sitio web donde queremos comprar.
Una opción menos aceptada por los internautas es la de acceder a la compra pinchando en los links de los mails que se nos envían sin ser solicitados. Sin embargo muchas empresas de seguridad online han lanzado campañas alertando a los posibles ingenuos de que tengan cuidado de dar sus datos a este tipo de páginas que han aparecido en nuestros mails. Dicen estas empresas que “hay que ser conscientes de las tiendas de Internet falsas, ataques de hackers o mensajes de correo electrónico fraudulentos”.
Y no sólo para los usuarios puede ser beneficioso la compra online, sino también para los comercios. La empresa de soluciones de Internet Ylos ha lanzado un mensaje a los comerciantes españoles animándoles a vender sus productos en línea ya que dicen que “es más accesible (que los negocios tradicionales) y no son necesarios grandes recursos para su puesta en marcha” por lo que creen que es buen recurso innovador para hacer crecer las empresas.
Según Ylos, en comparación con Europa, “en España aún nos queda mucho camino por recorrer” en el campo del comercio electrónico. Esta empresa sostiene que una importante razón es que “a las empresas les cuesta incorporar las nuevas tecnologías o lo hacen de forma poco eficiente”. Además, afirma que aspectos como “la logística y el transporte suponen una importante barrera para el sector” al igual que las autoridades que “se limitan a regular añadiendo nuevas barreras”.
Ahora nos toca decidir cómo queremos hacer las compras navideñas que aún faltan. Si sentados desde el sofá de casa o en las concurridas tiendas del centro, sintiendo el verdadero ‘espíritu navideño’.