También el precio. Para Dell, que siempre ha sido muy prudente con sus adquisiciones, pagar 340 millones de dólares no es algo que pueda pasar desapercibido. Sólo es comparable a cuando compró Alienware y la poco exitosa ConvergeNet en 1999.
En palabras de David Marmonti, presidente de Dell EMEA, “esta fusión entre la actividad de software de Dell y ASAP responde a nuestro interés por reinventar y simplificar la manera en la que nuestros clientes acceden a las tecnologías de la información”.
Muchos ven en esta compra, y en la de la semana pasada de Silverback, un intento de Dell por acercarse al canal.
Más información aquí.
Lea también :
¡Bienvenidos, lectores de TheInquirer!