El proyecto se presentó bajo el nombre Data-Driven Enhancement of Facial Attractiveness y está desarrollado basándose en un algoritmo generado por las preferencias estéticas de un gran número de personas, según sus rasgos y patrones de imagen para dar como resultado lo que la gente entiende por una “cara bonita”.
Para conseguirlo, el ordenador aplica reglas relativas a las distancias entre diversos puntos de las facciones de la cara, usando las imágenes y modificándolas según se necesite para conseguir que la cara cumpla los “requisitos” exigidos de belleza, usando proporciones y la forma. El proceso es completamente automático y por si no os lo creéis, os dejamos un vídeo demostrativo como prueba. Quién sabe si en un futuro veremos una cámara de fotos que integre el algoritmo y su eslógan sea: “Con la cámara blablabla siempre saldrás bien”.
vINQulos
Página del proyecto (vía Microsiervos)
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