El principal reto que observan los directivos españoles y que deben enfrentar sus trabajadores es lo que se conoce como “liquidity” o la habilidad para adaptarse con facilidad a una empresa, además de tener competencias multitarea y transversales. Así lo estima el 66 % de los directivos, de acuerdo con el estudio Soft Skills 4 Talent del Human Age Institute.
“La rápida evolución del mercado y los continuos cambios que experimentan las organizaciones hacen que la capacidad de adaptación de las personas se torne una necesidad indispensable para las empresas”, valora Montse Moliner, Directora de Empleabilidad de Human Age Institute.
“Es por ello que los profesionales deben responsabilizarse de mantener y actualizar constantemente sus conocimientos y competencias adaptándolos a las necesidades del entorno”, añade Moliner, “a la vez que las empresas también contribuyen al crecimiento y desarrollo de su talento”.
Esa capacidad de adaptación sería para los directivos de nuestro país mucho más importante que otras como “learnability” (25 %) y “mobility” (9 %). Esto es, que las capacidades de aprendizaje continuo y movilidad.
¿Y qué competencias transversales son las que más destacan? La mayoría de quienes han respondido apuesta por la solución de problemas, la denominada inteligencia emocional y una apropiada toma de decisiones. La proporción de ejecutivos que aboga por estas competencias es, en todos los casos, superior a tres quintas partes.
Mientras tanto, tan sólo un 15 % considera que son clave las competencias digitales. La transmisión de conocimientos se queda también corta, con otro 15 %. Algunos votos más se llevan el seguimiento y el control, con un 21 %.
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