France Telecom se enfrenta a su primera demanda judicial fruto de la oleada de suicidios en la que se encuentra sumida su plantilla. La muerte en agosto de uno de sus trabajadores en Besançon será examinada por el Tribunal de Primera Instancia de la ciudad.
Nicolas G., de 28 años, fue el suicida número 20 entre los trabajadores de la empresa y había dejado por escrito el impacto negativo que su trabajo tenía en su día a día.
La muerte de Nicolas G. fue además una de las que aceleró el boom mediático de la situación, que se convirtió a finales de verano en portada de los periódicos y en noticia de entrada de los medios de todo el mundo.
El tribunal de Besançon tendrá ahora que determinar si en el caso de esta muerte se produjo un homicidio involuntario, al no prestar France Telecom la suficiente atención, a pesar de las señales, a la salud de su empleado.
El proceso se ha iniciado el pasado lunes, aunque no se ha filtrado a la prensa hasta hoy. Desde France Telecom señalan que aún no cuentan con constancia oficial del mismo, tal y como publica Le Monde.
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