Con el BRIX pocket gaming PC, Gigabyte nos trae un barebone pensado para juegos y de dimensiones increíblemente reducidas, actualizado con los últimos procesadores Intel Haswell y su GPU integrada Iris Pro graphics.
Este pequeño cubo también cuenta con puertos HDMI, mini Display Port, Ethernet y 4 x USB 3.0, además de puerto de audio, Bluetooth 4.0 y por supuesto Wi-Fi.
Lo que no lleva de serie es memoria RAM, ni disco duro o SSD. Tampoco sistema operativo ni ratón, teclado o mando de juego alguno. Si tenemos en cuenta que cuesta unos 500 dólares, quizás no sale tan barato como pensamos.
Su carcasa de aluminio estará disponible en rojo, amarillo o negro, y aunque todavía no está claro cuando saldrá a la venta, posiblemente dentro de muy poco salgamos de dudas.
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