El malware en aplicaciones en la nube creció a lo largo de 2021, según datos de Netskope.
Más de dos tercios de las descargas de malware que se produjeron el año pasado provenían de aplicaciones cloud.
Esto significa que el malware entregado en la nube es ahora más frecuente que aquel que se entrega vía web.
Google Drive ha adelantado a Microsoft OneDrive como la aplicación con mayor número de descargas de malware.
Eso sí los documentos maliciosos de Office se han incrementado, pasando del 19 % al 37 % de todas las descargas de malware. Es decir, prácticamente se duplicaron en un año, ya que los atacantes continúan usando archivos infectados como punto de acceso.
Netskope distingue entre “tres tipos de abuso” distintos: “atacantes que intentan obtener acceso a las aplicaciones en la nube de las víctimas, atacantes que se aprovechan de las aplicaciones en la nube para distribuir malware y personal malintencionado que utilizan aplicaciones en la nube para la exfiltración de datos”.
Su informe “sirve como recordatorio de que las mismas aplicaciones que utilizamos con fines legítimos serán atacadas y utilizadas de forma abusiva”, advierte Ray Canzanese, director de investigación de amenazas del Netskope Threat Labs.
Otro dato que aporta esta investigación es que más de la mitad de las instancias de aplicaciones en la nube gestionadas acaba siendo objeto de ataques de credenciales.
Y se sabe que un 98 % de los ataques provino de nuevas direcciones IP el año pasado.
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