La pantalla, que sería de tinta electrónica, trae ventajas tanto para los usuarios como para los fabricantes. La idea es crear un dispositivo que pueda salir de la fábrica tal y como lo hacen los periódicos en la imprenta, pues el método actual de fabricación en serie, se parece mucho a la forma en que se cortan las galletas. Esto no sólo permitiría que las pantallas fueran flexibles, sino que además haría que las pantallas fuesen más baratas de lo que lo son actualmente.
La utilidad que le piensan dar (al menos, de momento) es la de mostrar mapas y direcciones para orientarse sin problemas, lo cual puede ser muy útil en una guerra o en un territorio desconocido para los militares que estén trabajando en él. Sin embargo, esperemos que en un futuro tu tambien puedas tener tu propia pantalla enrollable en la muñeca y al leer Gizmodo en ella te acuerdes de este artículo. [Wired] — Fco. José Cañizares.
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