La duda y el gran debate que se plantea actualmente, sin embargo, en lo que se refiere a las redes sociales es si el networking debe ser abierto a todo el mundo, es decir, basado en la cantidad o, por el contrario, debe estar basado en la calidad. ¿Debemos conectar con cualquiera que desee hacerlo o quiere invitarnos a participar en su red de contactos con independencia de si lo conocemos o no? En definitiva, calidad vs. cantidad.
La principal objección que se esgrime en contra de una postura de “netwoking abierto” a todo el mundo es que efectivamente es imposible conocer a todas las personas que nos mandan una invitación para agregarnos a su red de contactos y que eso reduce el valor de nuestros contactos. Sin embargo, si bien es cierto que los contactos cualificados, entendiendo por tales, aquellas personas que efectivamente se conocen, por algún motivo, inicialmente parece que son más productivos que aquellos que no se conocen de nada, lo cierto es que el valor de los contactos no se sabe a ciencia cierta hasta que no se investiga sobre ellos.
Por tanto, si se rechaza de entrada un contacto por el sólo hecho de no que no forma parte de nuestro entorno o no lo conocemos de nada, podemos estar perdiendo una gran oportunidad que de momento, resulta ser invisible, pues lo que es un hecho es que el verdadero valor del networking no es la persona con quién se conecta sino su esfera de influencia.
El
Networking es como la Publicidad, es una forma de exponerse y una forma de optimizar la creación de oportunidades. Así, es evidente, que difícilmente podríamos vendernos a nosotros mismos, a nuestro producto o a nuestra empresa si los demás no supiesen que existimos. En la gestión de contactos y especialmente en el ámbito de las redes sociales cuanto más grande sea tu red más expuesto estarás.
Concretamente en la red profesional Linkedin, con 35 millones más de usuarios, sería difícil discutir, por ejemplo, que no existen cientos de potenciales interesados en ti, en tu producto o en tu empresa y por tanto, lo que pasaríamos a denominar contactos de “calidad”. En consecuencia, en la medida en que es imposible en que seas tú quién por tu cuenta encuentres todas esas oportunidades, es preciso que dejes a los demás que te encuentren a ti.
Desde este punto de vista, mantener una postura de “networking abierto” es útil ya que permite optimizar la utilización de las redes sociales y construir una red de contactos más potente, que es de lo que se trata, pues la realidad es que cuanto más exposición se consigue a las redes de contactos de los demás más probabilidad existe que alguien que nos necesita nos encuentre. Esta es en definitiva la manera de atraer oportunidades y de generar negocio. Este es, por lo demás, el valor del “networking abierto”: Generar visibilidad que no es otra cosa que una forma de marketing ya sea de uno mismo, de su producto o de su empresa.
Para finalizar y con carácter de resumen quisiera aportar
cinco breves claves de networking dirigidas a generar negocio: