Ocupando un tamaño muy similar al real, este R2-D2 hinchable tiene la gran ventaja de que si en algún momento quisieras prescindir de sus servicios basta con abrir la válvula que retiene el aire en su interior y todo queda reducido a un manejable conjunto de plástico arrugado.
Lo mejor es que cuando está en todo su esplendor puedes manejarlo por control remoto sin demasiada preocupación por sí se lleva algún golpe, salvo que sea contra alguna superficie puntiaguda.
Mide 65 centímetros de altura, se mueve en cuatro direcciones y además gira son sí mismo y a modo de tentetieso galáctico si se lleva un golpe capaz de volcarlo puede recuperar la verticalidad por sí solo. Por sí te juntas con un grupo de amigos con ganas de hacer carreras de unidades R2 el mando de control permite que hasta 3 unidades puedan ser manejadas sin interferir sus frecuencias de radiocontrol.
El alcance del mando a distancia para dirigirlo alcanza los 8 metros y para su funcionamiento sólo te pedirá ña pila de 9v para el mando RC y 4 de tipo AA para la propia unidad R2. ─[ThinkGeek]
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