Red Hat OpenShift 4.7 incide en la modernización de las aplicaciones

Red Hat quiere aliviar la carga de los equipos de TI con funcionalidades que permiten unir aplicaciones nativas de nube y tradicionales.

Red Hat ha actualizado su plataforma empresarial de Kubernetes, Red Hat OpenShift, para ayudar a unificar aplicaciones tradicionales de misión crítica con aplicaciones nativas de la nube.

Red Hat OpenShift 4.7 incide en la modernización de aplicaciones a través de diferentes funcionalidades, permitiendo trasladar creaciones heredadas a arquitecturas basadas en microservicios.

“Red Hat entiende que la modernización de las aplicaciones significa una inmensa oportunidad para las organizaciones, pero que al mismo tiempo intensifica la presión que hay sobre los ya estresados equipos de TI”, comenta Ashesh Badani, vicepresidente sénior de Cloud Platforms en Red Hat.

“Red Hat OpenShift 4.7 incorpora características para ayudar a las organizaciones a modernizarse en fases, según los plazos que tengan más sentido para los equipos de TI y sin interrumpir los servicios actuales”, explica.

“Además, al unir las aplicaciones modernas y tradicionales, Red Hat OpenShift es capaz de proporcionar una experiencia operativa y de gestión consistente en todas las aplicaciones”, destaca, “independientemente de dónde se encuentren o de la infraestructura subyacente”.

Esta versión se basa en Kubernetes 1.20 e incluye la última versión de OpenShift Virtualization. Permite importar máquinas virtuales existentes, además de incluir plantillas para la creación de nuevas máquinas con un solo clic, y se integra con Red Hat Advanced Cluster Management for Kubernetes

Por otro lado, Red Hat OpenShift 4.7 amplía el soporte de Windows Containers. Y pronto será compatible con Windows Containers en vSphere utilizando Installer Provided Infrastructure.

Red Hat OpenShift 4.7 incorpora OpenShift GitOps en technology preview. Y hará lo mismo con Migration Toolkit for Virtualization, para simplificar las migraciones a escala.