De hecho a simple vista parecen prácticamente iguales pero un análisis más a fondo nos descubre que la pantalla de este nuevo smartphone no será SuperAMOLED, sino Super Clear LCD de 4 pulgadas con resolución 480×800 píxeles.
También hay cambios en el procesador, ya que Samsung ha decidido reemplazar el chip Hummingbird por un procesador OMAP 3630 de Texas Instruments a 1GHz.
El tamaño del nuevo modelo es prácticamente el mismo, pero ha aumentado ligeramente el grosor hasta los 10,59 milímetros de espesor (nada que ver con el ultradelgado Galaxy S2) y también el peso, que alcanza los 131 gramos.
También se incrementado la capacidad de memoria RAM que ya no es de 512MB, sino de 650MB y se ha mejorado la batería cambiando la de 1.500 mAh del Galaxy S por otra de 1650mAh.
El Galaxy SL cuenta con ranura para tarjetas microSD, puerto USB, conectividad WiFi, Bluetooth y se presentará únicamente en la versión de 16GB de almacenamiento interno.
El nuevo Galaxy contará con una cámara similar a la del Galaxy S con 5 megapíxeles y capacidad para grabar vídeo a 720p, y también se mantiene la apuesta por Android como sistema operativo en su versión 2.2 o Froyo.
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