Pueden comenzar a hacerse muy populares y suponer un llamativo reclamo para una gran parte de potenciales clientes a los que el precio más bajo posible les supone un criterio definitivo.
Tiendas online como Amazon o eBay pueden tener una seria competencia al menos en parte de los objetos que venden, aquellos que China puede ofrecer a precio de saldo, porque hablamos de “iPhones” o “Galaxy SIII” con un 70% de descuento … aunque probablemente todo parecido con dichos dispositivos termine en el aspecto físico externo. Aunque se trate de móviles completamente operativos y funcionales, a veces incluso con prestaciones que superan a las del original como puede ser la capacidad de sintonizar radio RDS, TDT o aceptar dos tarjetas SIM, lo que adquirimos es una de las famosas imitaciones chinas.
Algunos de estos dispositivos, como el mencionado tablet de menos de 40€ pueden resultar más que suficientes para usuarios con requerimientos no excesivamente exigentes y pueden incurrir en el tópico de usar hasta que se estropea y no molestarse en repararlo pudiendo adquirir otro nuevo por un precio irrisorio.
Páginas como Focalprice o Dealextreme pueden llegar a generar desconfianza (sobre todo si pertenecen a un grupo que se llama AliBabá), especialmente cuando aquellos compradores habituados a las entregas en escasos días de Amazon o eBay ven como pasan las semanas, los días y hasta algún mes y su compra no llega.
Una de las razones para esto reside en la mecánica que facilita unos envíos sin cargo alguno y que facilita el desembarco masivo de estas mercancías en Europa. El procedimiento habitual de estas tiendas online consiste en acumular mercancías pedidas por clientes europeos hasta ocupar un contenedor al completo, lo que hace que el coste de transportar el mismo en barco desde China, repartido entre los miles de envíos que alberga, no pueda llegar ni a ser expresado en céntimos, con lo que no llega a repercutirse en el precio de objetos que, por proceder además de fábricas en la zona, aún resultan más económicos.
El espectacular crecimiento del sector de venta online de productos informáticos en China aún está en sus inicios, puesto que diversos analistas estiman que no será hasta 2025 que logre la supremacía mundial. Ello debido a otro factor muy importante, y es que en la propia China aún es muy reducido el número de internautas en comparación a la proporción de los mismos existente en USA, Europa o Japón. Conforme el mercado interior vaya accediendo a la Red y sean capaces de ampliar el mercado de este tipo de mercancías la evolución será aún más espectacular que las cifras que actualmente se manejan.
En ese momento estos modernos bazares orientales online es muy posible que dejen absolutamente en mantillas los resultados de los actualmente pujantes Amazon o eBay.
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