Virus en teléfonos móviles. ¿Viene el lobo?

Jorge de Miguel, responsable de G DATA para España y Portugal, asegura que no hay que bajar la guardia, pero tampoco alarmarse.

Dicho de otra forma: con mucho menos trabajo, los ciberdelincuentes obtienen mayores beneficios si deciden atacar a un ordenador personal en lugar de a un smartphone, y ellos mismos lo han podido comprobar: de los 145 nuevos virus para móviles que crearon en 2005 pasaron a 76 en 2006 y a apenas 23 en 2007.

No obstante, en 2008 se produjo un leve repunte con 111 amenazas de este tipo, pero el potencial destructivo de la mayoría de ellas no pasaba de la mera inserción de publicidad en los terminales. En lo que llevamos de año, se han creado un total de 26 nuevos virus: 16 para J2ME (Java móvil), 8 para Symbian y 2 para WinCE. En cambio, los sistemas Win32 recibieron la avalancha de 228.129 nuevos casos de malware, con lo que podemos seguir viendo cómo la comparación numérica pone las cosas en su sitio.

Para algunos fabricantes, se trata simplemente de gritar “¡que viene el lobo!” y que los usuarios corran a adquirir sus soluciones de seguridad para teléfonos móviles, mientras que otros preferimos valorar la amenaza en su justa medida y alertar cuando realmente sea necesario, para no caer en el mismo desenlace que el de la célebre fábula y provocar que, llegado el momento, no se nos tome en serio.

Evidentemente, no se trata de que los dispositivos móviles sean inmunes y que no puedan estar expuestos al peligro –que lo están, aunque en pequeña medida por el momento-, pero atendiendo a los datos de los que disponemos, la programación de malware para smartphones sigue sin constituir una alternativa para la industria del cibercrimen, ni en términos de coste ni de beneficio.

No podemos bajar la guardia y es imprescindible seguir atentos a la evolución futura de este tipo de malware, pero pensamos que matar moscas a cañonazos no es la solución.