Xiaomi se asegura un préstamo de 1.000 millones de dólares para su expansión internacional

Las marcas chinas de smartphones están experimentando un buen momento de forma. Huawei, Oppo y vivo han conseguido incrementar su cuota conjunta de mercado en un 5% en un año, ocupando el 22% en un sector en el que, pese a todo, las líderes siguen siendo Samsung, con otro 22%, y Apple con el 14%.

En ese listado llama la atención la ausencia de Xiaomi, una de las marcas más reconocidas que, sin embargo, ha visto en los últimos tiempos caer sus ventas. De hecho, la compañía tomaba la decisión a principios de año de no revelar los datos de 2016. Su CEO, Lei Jung, admitía entonces que habían crecido demasiado rápido en los primeros años y que necesitarían echar el freno, para “asegurar un crecimiento sostenible”.

A lo largo de estos meses, la empresa ha dado signos de intentar afianzarse, con medidas como la serie de acuerdos suscritos con Nokia que les aseguran no solo el uso compartido de patentes, sino la colaboración en determinados proyectos.

Este replanteamiento de su estrategia recibirá ahora un nuevo impulso económico, con la firma de Xiaomi de un préstamo de 1.000 millones de dólares. En el acuerdo están involucrados 18 bancos de Europa, Oriente Próximo, India, China, Hong Kong y Taiwan, explican en Reuters, bajo la supervisión global de Deutsche Bank y Morgan Stanley.

La compañía utilizará esta entrada extra de dinero en impulsar su expansión internacional, además de acelerar la implantación offline con la apertura de nuevas tiendas físicas.

El CFO de la startup china, Shou Zi Chew, se ha referido a esta nueva línea de crédito, indicando que el apoyo de las entidades financieras supone “un fuerte respaldo de Xiaomi por los mercados de capitales internacionales”.

Xiaomi es el tercer unicornio en valoración, por detrás de Uber y Didi Chuxing, al estar calculado su valor de mercado en 46.000 millones de dólares.