Apple se ha visto obligada a anunciar otro programa de retirada de componentes vinculados a sus dispositivos. A finales de febrero fue el “Programa de intercambio del adaptador del enchufe de CA de Apple”, y ahora es el turno del “Programa de reemplazo del cable de carga USB-C de Apple”.
La compañía de la manzana mordida ha reconocido que en manos de algunos de sus clientes hay cables USB-C defectuosos que fueron vendidos junto a un MacBook, y también de manera independiente, durante el mes de junio de 2015.
Un fallo en el diseño de dichos cables podría provocar problemas de carga. Es por eso que Apple se compromete a sustituir de forma gratuita los productos afectados.
Para reconocerlos basta con buscar el mensaje “Designed by Apple in California. Assembled in China” a lo largo del cable. No tienen número de serie tras este texto, al contrario que los nuevos componentes que entregará Apple.
Como suele ser habitual en estos casos, los usuarios tienen que acudir a una Apple Store, una tienda autorizada o contactar con el equipo de soporte técnico. Además, la firma de Cupertino enviará los cables a casa de quienes le hayan entregado una dirección válida.
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