Un autobús con 65 plazas, fabricado por Toyota e Hino, transportará a los pasajeros entre la ciudad y el aeropuerto central de Japón. Este aeropuerto, cuya construcción se finalizó el año pasado, utiliza paneles solares y otros conceptos de energía limpia.
El nuevo autobús utiliza hidrógeno puro como combustible. Normalmente, las celdas de energía utilizan hidrógeno en una forma intermedia, como el metanol, ya que es difícil de almacenar y gestionar en su estado gaseoso. En el autobús el gas se absorbe y posteriormente se lanza por un laberinto de aleación dentro del tanque de combustible del vehículo.
La celda de energía genera electricidad, que llega al motor eléctrico. El autobús también utiliza una batería secundaria para almacenar y reutilizar la energía generada durante el frenado. Toyota afirma que su tecnología de hidrógeno puro está a punto de sobrepasar a los motores de gasolina en potencia.
Dentro de las celdas de combustible, el hidrógeno se combina con el oxígeno del aire para generar una reacción química que genera 90 kilovatios de electricidad. Y el único desperdicio es vapor de agua.
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