Conecta tu PSP

Sácale todo el partido a las múltiples opciones de conectividad de la consola portátil de Sony.

1- Conexión a otras consolas

La PSP se puede enchufar a un ordenador, a una Play Station 3 o incluso a una Xbox 360. No obstante, las opciones de comunicación inalámbrica, que permiten conectar una PSP con otras PSP, son las que realmente distinguen a la consola de Sony. En este sentido, la opción más interesante es la que permite conectar dos o más consolas y compartir partidas, objetos de los juegos u otros datos con los demás.

Lo primero que debes saber es que la posibilidad de participar en línea con tus amigos siempre viene indicada en la parte trasera de la caja de cada juego, donde además aparece reflejado el número máximo de participantes que podrán tomar parte en la partida.

Asimismo, la distancia a la que deben estar situadas las consolas depende de los obstáculos que haya en el camino, aunque se puede establecer un límite máximo en torno a los 100 metros para garantizar la comunicación en línea recta.

Conviene recordar que para conectar dos PSP entre sí debe estar activado el interruptor de conexión WLAN. No obstante, si tu consola no está en la posición adecuada, el juego te avisará con un mensaje que te dirá que ha sido imposible usar la comunicación inalámbrica.

Además, algunos títulos ofrecen la posibilidad de usar un único CD para varias consolas. Para ello, debes entrar en las opciones del juego y seleccionar la correspondiente al juego en red. Cuando te pregunte sobre el tipo de partida, tendrás que elegir alguna que tenga como opción jugar con un único UMD. Hecho esto, te invitará a que los demás participantes pongan sus consolas en modo de búsqueda y, a continuación, verás cómo aparecen en tu pantalla los nombres de los otros jugadores.

Como configuración añadida, puedes elegir un canal predeterminado por el que irán las comunicaciones entre consolas. Esto deberás hacerlo en la sección Ajustes de red, dentro de la primera columna del menú inicio, denominada Ajustes. Allí deberás elegir el modo Ad hoc y dejarlo en automático si no experimentas ningún problema de conexión. En caso contrario, selecciona alguno de los canales disponibles para tratar de evitar posibles interferencias.


2- Partidas económicas en red

La mayoría de juegos de la PSP obligan a usar un CD en cada una de las consolas que van a participar. Esto supone un gasto extra si sólo tienes intención de usar ese título de ven en cuando y no crees que le vayas a sacar partido cuando juegas solo.

Por fortuna, existe una solución para este problema. En primer lugar, inicia el juego y ve a las opciones de partida en red local o por interconexión de sistemas. Una vez allí, selecciona el tipo de juego y pon todo a punto para que se quede a la espera de otros participantes.

Después, pulsa el botón HOME y deja la pantalla que te pregunta si quieres abandonar el juego. Saca el disco de la consola y mételo en la PSP del jugador con el quieres disputar la partida. Dile que haga todo el proceso necesario hasta que se quede a la espera del anfitrión para empezar a jugar, así encontrará la partida que tú has puesto en marcha y podrá unirse a ella.

A continuación, pulsa el botón necesario para que comience el juego en la consola que hace las veces de anfitriona y haz clic en HOME de nuevo. Haz lo mismo en la consola invitada y vuelve a introducir el disco en ambas consolas para que continúe la carga del juego. En este sentido, conviene recordar que tal vez necesites realizar este proceso alguna vez más antes de entrar realmente en la partida.

También puede suceder que una de las consolas no responsa al leer el disco que no tiene dentro, pero con algo de práctica descubrirás cuándo debes sacar el disco y en qué momento es imprescindible que esté en cada una de las consolas. Cuando tu experiencia sea mayor, incluso podrás jugar con más de un amigo y elevar el número de PSP que participan en tus partidas económicas, siempre y cuando el juego se preste a ello.

3- Conexión a Internet

Si dispones de acceso inalámbrico a Internet, te resultará muy sencillo conectar tu PSP al ciberespacio. En primer lugar, tendrás que crear una conexión de red, de manera que puedas grabar tus datos para usarlos cada vez que sea necesario.

Dírigete a Ajusted de red, dentro del menú Ajustes, y selecciona Modo infraestructura. Luego pulsa X, selecciona la opción Nueva conexión y vuelve a pulsar X. No obstante, si no sabes cuál es la configuración de la red que quieres usar o está totalmente abierta, lo mejor es seleccionar la opción Automático.

También puede suceder que la consola no consiga conectarse a ninguna red. En tal caso, pulsa Escanear, para comprobar que hay cerca redes inalámbricas compatibles, selecciona Introducir manualmente, si conoces los datos de la red a la que quieres conectarte, pulsa X, añade el nombre de la red y haz clic en Aceptar.

El siguiente paso consiste en elegir el nivel de protección que quieres asignar a tus conexiones de Internet, para evitar interferencias por parte de intrusos. En caso de no saber qué nivel escoger, consúltalo con quien haya realizado la instalación de tu red.

Con los ajustes de dirección sucede algo similar. Al instalar tu red debes haber establecido unas normas que pueden ser automáticas o estar definidas con precisión. En el primer caso, podrás dejar que la consola pregunta al router cuál va a ser su dirección única en la red, así como el resto de los parámetros de conexión. En caso de que selecciones el modo manual, deberás introducir tú mismo los siguientes datos: dirección IP, máscara de red, router predeterminado y direcciones DNS.

Una vez que todo esté configurado, sólo tienes que acceder al proceso de prueba, que intentará abrir una página web dentro del navegador de tu consola. Si el resultado es exitoso, podrás conectarla a Internet siempre que el punto de acceso que acabas de configurar se encuentre activado. De otro modo, tendrás que comprobar los pasos anteriores para asegurarte de que todo el proceso se ha realizado de forma correcta.